El Benicarló y el Onda protagonizaron un buen partido, jugado de poder a poder, pero deslucido al final por un exceso de brusquedades y tarjetas. Al final, se impusieron los locales.
En la primera mitad, las mejores ocasiones fueron visitantes, encadenando tres consecutivas en la misma jugada. El balón, tras dar en el larguero, fue doblemente repelido por Aguayo y Lorite --el mejor del Onda--, que había sustituido al lesionado Catalá, también probó suerte y el meta local desvió el esférico en una buena acción.
La segunda parte fue la mejor del Benicarló en toda la temporada, con un juego rápido y vertical que tuvo premio muy pronto. Un córner servido por Marcos Cano fue peinado por Víctor Esbrí para que Layo, a bocajarro y también de cabeza, abriera el marcador. Tras varias ocasiones en ambas porterías, el guardameta Canari se hizo un lío tras una cesión de su defensa y tocó el balón con la mano. El consiguiente libre indirecto dentro del área lo aprovechó Marcos Cano para marcar el segundo tanto de la contienda.
Más tarde perdonó Carrillo para los locales y el propio Marcos Cano erró también el tercero. Después Andoni resolvió un barullo en el área local y acortó distancias al tiempo que ponía emoción e incertidumbre al choque en los minutos finales. H
