Un centenar de 'tifosi' ha tratado de enturbiar el sueño de las estrellas blancas frente al hotel que ocupa el conjunto de Zinedine Zidane en Nápoles, a la espera del encuentro de esta noche en el que los italianos trataran de remontar el 1-3 del Santiago Bernabéu, o, por lo menos, intentarán tocarles "los huevos" a los madridistas, según palabras del técnico local Maurizio Sarri.

Durante todo el lunes no cesaron de sonar los cláxones de los coches y por la noche hubo cacerolada ante el hotel blanco, en unas secuencias que recordaron la acción de aficionados del Barça cuando el Madrid durmió en un hotel de lujo del Eixample barcelonés, en lo que fue la primera visita de Luis Figo con los colores blancos.

LLUVIA Y POCO DESCANSO

El estadio de San Paolo abrirá las puertas seis horas antes del partido

A pesar de la fuerte lluvia que cayó en Nápoles y de que el ayuntamiento local hubiera tomado medidas especiales para garantizar la privacidad blanca, no pudieron evitar elruido de madrugada en la zona del hotel del Madrid.

Por si fuera poco, la encerrona al Madrid va en aumento y el estadio de San Paolo abrirá las puertas nada menos que seis horas antes del inicio del partido. Se esperan más de 60.000 seguidores en las gradas napolitanas.