El gusanillo por el encuentro de este domingo (18.00 horas) roe las entrañas de los albinegros. Una final superlativa en Castalia, contra el Olímpic, que estimula a Manu Calleja, con ganas de centrarse, de una vez por todas, en lo futbolístico. Así le sale la vena más pasional, la que deja un puñado de titulares.

«¿Que cómo veo el partido? Es el desembarco de Normandía, el día D y la hora H, es la guerra...», destaca. «La necesidad agudiza el ingenio, y aquí tenemos mucha necesidad», avisa ante la obligación de al menos puntuar para desterrar cualquier contratiempo y un rival que piensa más en su eliminatoria. «Tenemos que dejarlo todo en el campo, hacer un partido de 10. El nivel de intensidad y concentración debe ser del 200%», destaca.

Siempre ha defendido al vestuario, pero nunca con tanta vehemencia como esta vez. «De la plantilla solo puedo hablar bien. Una plantilla a la que en los últimos días no se la está tratando bien. Son los tíos más honrados que he entrenado nunca: no me iré siendo mejor entrenador, porque me siento frustrado al no haber podido entrenar como yo quiero, pero sí me iré siendo mejor persona gracias a ellos», dijo.

Calleja sigue insistiendo que «meterse en el play-off es un hito, aunque haya gente que no lo valora así». Además, utilizó una curiosa comparación: «No sé si la productividad de cualquier empresa, si los operarios estuviesen así, sería mejor...». «El rendimiento que han dado, con los problemas de lesiones, situaciones muy complejas todos los días, que yo por desgracia no había vivido..», dejó caer. «Aquí se hace un doctorado en solución de problemas», añadió antes de dar un detalle poco conocido de la visita al Orihuela: «Había un virus, jugadores con gastroenteritis que cumplieron, lo compensaron con la defensa de esta camiseta».

Sobre el encuentro, pide salir al ataque... pero con cabeza: «Especular con el resultado nos puede llevar a la derrota, seguro. Si marcamos al principio, el equipo se quitará un peso. Si dejamos que el partido avance mucho, empezarán las dudas, y a estos futbolistas, con la carga emocional que arrastran, les puede pesar».

Con todo, ha empezado a planificar los play-off: «Si te digo que no he mirado las clasificaciones de otros grupos, miento. He echado un vistazo, para ver qué personas conoces en esas comunidades, por sí te pueden echar una mano con la información de los posibles rivales», corroboró.