Un equipo de gente de la casa que haga disfrutar a los aficionados. Ese es el objetivo del humilde Canet lo Roig, que intentará acabar la liga lo más arriba posible, y si es posible entre los diez primeros, gracias a un equipo muy competitivo en el que reina el buen ambiente.

El reto de la directiva encabezada por Plácido Bernal, que se estrena esta campaña como presidente, es que en dos temporadas todos los integrantes de la plantilla sean naturales de Canet Lo Roig. Actualmente un total de nueve futbolistas cumplen este requisito, pero en un futuro este número se incrementará a tenor de la tenacidad de sus dirigentes.

SIN TECHO APARENTE // El equipo está diseñado para pasarlo bien, pero sin renunciar a nada si se pone a tiro. Si el Canet Lo Roig va ganando partidos no escatimará esfuerzos para conseguir retos mayores, aunque la presión es mínima, casi nula por lograrlos. El Canet es un club familiar que premia a sus fieles seguidores.

Como muestra, un botón. El club ha puesto a disposición de sus aficionados unos carnets de abonados a un módico precio. Por tan solo 45 euros, los seguidores pueden ver todos los partidos como local del Canet e incluso tienen derecho a una cena a lo largo de la temporada. Incluso, los jubilados tan solo tendrían que pagar 30 euros. Los interesados pueden pagar la cuota en la Caja Rural de la localidad o en el propio campo del Canet los días de partido en casa.

En cuanto a la confección de la plantilla cabe destacar que el club ha realizado un total de ocho nuevas incorporaciones.

Lo que llama la atención es que todos estos jugadores no tenían equipo federado la temporada pasada, por lo que se han enrolado en el proyecto del Canet con la ilusión por bandera. Así pues, el Canet afronta esta temporada convencido de que puede hacer disfrutar a sus aficionados. H