Castalia recuperará el suministro eléctrico y la normalidad gracias al Ayuntamiento, que ya trabaja en la obligada obra requerida por Iberdrola que, a instancias de la Conselleria d’Indústria, fue la que, la semana pasada, cortó la luz al estadio y, por extensión, al Castellón y a un David Cruz que vuelve a ver como le solucionan la papeleta.

El origen del problema se remonta a 2014, cuando Iberdrola emitió un informe que alertaba de las deficiencias en los sistemas eléctricos de distintas instalaciones municipales, instando a que fueran subsanadas con urgencia -en el caso de Castalia, en seis meses-. Sin embargo, Cruz dejó pasar el tiempo y no hizo nada cuando entonces, en virtud del convenio de cesión del estadio, estaba obligada a acometer la reforma. El presidente y consejero delegado del club ni siquiera actuó semanas atrás o incluso el lunes de la semana pasada, cuando recibió un ultimátum.

A CONTRARRELOJ

Desde el martes de la semana pasada, cuando se procedió al corte del suministro eléctrico, Castalia funciona con un grupo electrógeno, vigente, por ejemplo, en el derbi contra el Borriol del Jueves Santo.

La empresa subcontratada por el consistorio para este tipo de mantenimiento confía en acabar entre esta semana y la que viene, con lo que el derbi frente al Villarreal C (presumiblemente, el domingo 30 al mediodía), el estadio recobrará la normalidad, gracias a una obra que supondrá un coste para las arcas municipales -o sea, de dinero público, de todos- algo más de 20.000 euros, por diferentes conceptos.

Una situación que emponzoña todavía más la relación entre Cruz y el gobierno municipal que, incluso, alcanza las negociaciones de la compra-venta. Ahora, desde el entorno del presidente se señala al consistorio como responsable de que no se cierra el acuerdo con Ledus, añadiendo una nueva toma de hilaridad a las circunstancias que rodean al Castellón, cada vez más cerca de precipitarse por el abismo...