El Castellón no pudo lograr una victoria de prestigio en el duelo internacional ante el Cluj, líder de la liga rumana y que cuenta con varias participaciones en la Champions League, comprobándose que existe una diferencia entre ambos equipos. Fue un partido con poca historia, pero que además estuvo condicionado por el tempranero gol en propia puerta del canterano Sergi, que en su intento de ceder el balón con el pecho a Unanua lo introdujo en el fondo de las mallas. Luego llegaron los tantos de Hobah y Culio, todavía en la primera mitad, mientras que Costache anotó en la reanudación.

Pero lo más importante era que Sergi Escobar tenía la oportunidad de realizar diferentes pruebas en un amistoso de nivel, dando minutos a jugadores del filial y pudiendo ver en acción durante más tiempo a futbolistas que no tienen tanto protagonismo. Y cómo no, se pudo ver el estreno de Marc Castells con la camiseta albinegra en su regreso al equipo. Salió de inicio y jugó durante 57 minutos —hasta que fue sustituido por Amine—, demostrando que está en buenas condiciones físicas y que si el entrenador lo cree conveniente puede ser de la partida ante el Paterna.

De inicio y sin Cubillas en el terreno de juego —único delantero con el que cuenta el míster al no estar ayer tampoco presente Fonte—, llamó la atención ver a Serra como referencia ofensiva, con el canterano Palmer de mediapunta. Luego fue Colomer quien ocupó esta demarcación, pasando al interior zurdo cuando hizo acto de presencia Cubillas, al que en los poco más de 25 minutos que estuvo sobre el césped apenas le llegaron balones.

Y en un duelo en el que el Cluj demostró ser superior —también tuvieron su oportunidad otros jugadores del filial como Panadés, Sati y el portero Nahum—, el Castellón nunca le perdió la cara, intentando dejar una buena imagen. No tuvo mucha llegada, siendo las dos ocasiones más claras de Juanjo, con un remate al filo del descanso y otro en el minuto 60, pocos minutos antes de ser sustituido por Ferreres.

Y con todos los cambios realizados, Luismi tuvo que abandonar el césped en camilla por molestias en la rodilla derecha, por lo que los albinegros concluyeron con un jugador menos, aunque solo fue una anécdota.