El clima, la cercanía con la sede del Mundial y la calidad de las instalaciones han sido tres de los factores que han provocado que la selección de natación de Nueva Zelanda haya elegido Castellón para realizar la última fase de la preparación para llegar en las mejores condiciones físicas a la cita mundialista, que tendrá lugar en Barcelona entre los próximos 19 de julio y 4 de agosto.

Una decisión que demuestra, sobre todo el buen estado de las instalaciones deportivas de la capital de la Plana y en este caso de la piscina olímpica municipal, que será el lugar en el que los nadadores que han logrado la mínima realicen su puesta a punto. Este escenario ya ha acogido un Campeonato de España absoluto y lo volverá a hacer a finales de este mismo año, por lo que es reconocido a nivel nacional.

Y este motivo es, en gran parte, el que ha propiciado, que Nueva Zelanda venga a Castellón, ya que el seleccionador es español y conoce la piscina a la perfección. Se trata de Luis Villanueva, que se incorporó a principios de este 2013 para impulsar el nivel de los kiwis cara a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. Y la primera prueba de fuego será el Mundial de Barcelona.

15 días de estancia // La expedición de Nueva Zelanda, compuesta por 14 nadadores y siete miembros del cuerpo técnico, llegará a tierras castellonenses el 8 de julio y permanecerá hasta el día 23. En ese momento el Mundial ya habrá arrancado, pero la natación no comienza hasta el 28 de julio, por lo que la expedición seguirá los primeros días de competición en la capital de la Plana.

Y entre los integrantes del equipo que dirige Luis Villanueva destacan Lauren Boyle, Glenn Snyders, Gareth Kean y Matthew Stanley. Los cuatro estuvieron ya en Londres 2012 y repiten.

Y la referencia es Lauren Boyle, que ya compitió también en Pekín 2008 y en el Campeonato del Mundo de piscina corta disputado en diciembre en Estambul se colgó el oro en los 800 libre y fue bronce en los 400.