Santi Cazorla volvió a disputar un partido después de 21 meses (636 días) y de pasar un auténtico calvario con una sucesión de intervenciones quirúrgicas. Y lo hizo con la camiseta del Villarreal, que la ha brindado la oportunidad de volver a sentirse futbolista. De momento, está realizando la pretemporada y a su conclusión ambas partes decidirán si está en condiciones de unirse al nuevo proyecto del Submarino.

Y por lo visto ante el Hércules, las posibilidades aumentan. En 23 minutos -ingresó en el terreno de juego en el minuto 67- mostró grandes detalles, lo que invita a pensar en positivo. Por ahora, el asturiano solo tiene palabras para explicar sus sensaciones: “Es difícil de expresar lo que sentí. Después de mucho tiempo fuera de los terrenos de juego he vuelto a sentirme futbolista, pero me quedo con el cariño de la gente, con el recibimiento que tuve. Solo viendo esto ha merecido la pena el sufrimiento que he pasado”.

Cazorla se sinceró en una entrevista facilitada por el club, en la que quiso agradecer todo el apoyo que ha recibido siempre. “Nunca he perdido el contacto desde que me fui y ahora al volver me están tratando como si nunca me hubiese ido. Es impagable todo lo que están haciendo por mi en el club y voy a estar eternamente agradecido, por lo que solo pienso en devolverles todo el cariño y ojalá pueda volver a jugar a nivel profesional”, argumentó.

Tras reconocer que desde el primer momento le dijeron que se tomara “sin presión” esta nueva oportunidad, lamentó que “soy demasiado exigente y no estoy disfrutando el momento. Después de todo lo que he pasado tengo que aprender a disfrutar”.