Final triste y decepcionante para Rafa Nadal en el Abierto de Australia. El número 1 mundial tuvo que retirarse por problemas musculares en su pierna derecha, en el quinto set del partido de cuartos que lo enfrentaba a Marin Cilic (número 6 mundial), cuando el croata dominaba por 3-6, 6-3, 6-7 (5-7) y 2-0. El balear, hasta la quinta manga, dominaba en un durísima batalla que acabó perdiendo por su físico. Sin haber jugado ningún torneo antes de Melbourne, pagó la falta de rodaje.

El manacorense comenzó su calvario en el cuarto parcial. El croata lo aprovechó para tomar el mando (4-1), momento en el que Nadal pidió tiempo médico. Sus gestos de dolor auguraban lo peor. El número 1 cojeaba al apoyar la pierna derecha. En su palco le decían que lo dejara, pero él intentó aguantar. Lo hizo dos juegos más, pero en cuanto cedió su saque, decidió abandonar. «Es triste, un golpe duro. Es complicado aceptar una derrota así en un torneo donde sentía que tenía opciones de hacer algo», valoró un Nadal que, de haber ganado, se habría medido, por un puesto en la final, ante el británico Kyle Edmund (49º del mundo).

Carla Suárez tampoco pudo acceder a semifinales. La canaria fue superada por la danesa Caroline Wozniacki por 6-0, 6-7 y 6-2, en dos horas y 11 minutos.