Colombia se estrenó ayer con otro tropiezo del favorito. Colombia se estrelló ante Japón (1-2) en un duelo marcado por la segunda expulsión más rápida de la historia de los mundiales, la roja vista por Carlos, la Roca, Sánchez.

Esa acción condicionó un choque que los asiáticos acabaron llevándose por inercia en Saransk. James Rodríguez solo jugó la última media hora. Las malas noticias llegaron pronto para los amarillos por la expulsión de la Roca, que despejó con las manos un tiro de Kagawa, que también anotó el penalti.

Las tablas llegaron con una falta inexistente provocada por el Falcao fue transformada por el talentoso medio Quintero.

El jugador del Villarreal, Carlos Bacca, salió en la segunda mitad pero quien marcó fue Japón. Un cabezazo de Osako dio los tres puntos a una selección nipona que protagoniza la enésima sorpresa del presente Mundial.