El Castellón ya está de lleno en la tarea de diseccionar al Atlético Malagueño, adversario en la segunda ronda de los play-off de ascenso a Segunda B. Un proceso crucial en el que ha fichado a Joan Castillo. Un nombre que sonará, ya que formó parte de la plantilla albinegra en el aciago y complicado año del descenso a Tercera por impagos (2010/2011) y que viene de enfrentarse al filial blanquiazul con el Vilafranca.

“Es un rival muy potente, tal vez el mejor de los segundos, ya que no acabó campeón de su grupo por el golaveraje”, constata el central natural de Gavà, que ya ha trasladado sus impresiones a Álvaro Campos, con quien compartió vestuario en el Albacete y con quien habló por teléfono poco después del sorteo.

Con todo, pese a la diferencia entre un Vilafranca que hizo historia clasificándose por vez primera para una fase de ascenso a Segunda B y un Málaga B “hecho para subir”, lo cierto es que la eliminatoria fue equilibrada.

“Nosotros, en nuestro campo, les hicimos sufrir. Somos un equipo del perfil del Ontinyent y, apretándoles, les conseguimos neutralizar”, constata Castillo respecto al 0-0 de la ida. “Ellos pensaban que iban a sentenciar la eliminatoria en el primer encuentro y, muy posiblemente, cambiaron el partido de vuelta a La Rosaleda, donde a nosotros nos costó adaptarnos porque no estamos acostumbrados a jugar en un campo tan grande”, reforzó. Aun así, todo seguía igual en el descanso (0-0). Después, “un gol en fuera de juego posicional y otro que nos anulan a injustamente a nosotros” decantó el pulso en favor de los andaluces (2-0).

LÍNEA A LÍNEA // En un análisis por líneas, lo cierto es que no ve muchas fisuras: “La mayoría de sus jugadores son internacionales en categorías inferiores”. “El portero [Aarón] es alto. Luego tiene dos laterales muy ofensivos [Iván y Alberto]. El mediocentro defensivo [Deco] siempre viene a pedir la pelota y el otro [Cassano, ex del Villarreal] pone la calidad. Sin embargo, me quedo con los mediapuntas. Los dos extremos [Mula y Ontiveros], sobre todo el izquierdo, son muy peligrosos, pero yo me quedo con el enganche [Kuki, hijo del conocido Zalazar]. Arriba, en la ida, jugó el pichichi Jaime Moreno pero se lesionó y, en la vuelta, lo hizo Nesyri, un marroquí con más envergadura”.

PUNTOS flacos // Hasta ahí las virtudes... ¿y los defectos? “Por decir algo más débil, entre comillas, los centrales: si se les aprieta en la presión, como quieren salir siempre con el balón jugado, cometen errores”, dice. Con todo, Castillo también apunta a otro factor que puede inclinar la eliminatoria: “Nosotros metimos a unas 2.000 personas aquí [Vilafranca] y estaban sorprendidos. Un jugador suyo me preguntó en un córner que si siempre llevábamos a tanto público, se notaba que no estaban cómodos”. “Así que en Castalia, si van 9.000, 10.000, 11.000... con tanta gente el ambiente les puede superar”, agrega.

Así que, a modo de conclusión, Castillo destaca que las opciones del Castellón “pasan por que no se sientan cómodos en ningún momento, presionando arriba e intentando parar a Kuki”. Ese el partido a ras de césped; el otro, el de la grada, es para la afición. H