Florentino Pérez tenía muy claras las cuentas. Casi como si tratara de un famoso concurso de televisión, el presidente del Real Madrid expuso la siguiente ecuación: «400 dividido entre ocho igual a 50 por año». Es la media de goles de Cristiano Ronaldo desde que llegó al Bernabéu en el 2009, lo que ha llevado al dirigente blanco a entregarle, ayer, una camiseta conmemorativa con el número de los tantos que alcanzó el astro portugués después de su triplete al Atlético (3-0, ida de las semifinales de la Champions), el tercero que firma frente al conjunto rojiblanco.
Enrachado
Pese a que esas alturas muchos creen en su condición de extraterrestre, Cristiano asegura que no. «Soy de este planeta», afirmó un día después de su extraordinaria exhibición ante el vecino, un equipo que ha encontrado definitivamente su bestia negra en el Madrid con Ronaldo como brazo ejecutor después de marcarle 21 goles en 28 derbis. Hasta el choque del martes en el Bernabéu, el equipo rojiblanco solamente había encajado cinco goles en esta Champions, cifra que subió hasta los ocho con los tres tantos de CR7.
El astro portugués sigue asombrando al mundo, incluida la patria de su máximo rival, Leo Messi. En Argentina no ha pasado desapercibido el triplete de Ronaldo ante el Atlético, lo que le acerca al Balón de Oro. En los halagos va implícito un mensaje a Messi. «Cristiano hace goles en partidos decisivos», apunta el sector más crítico.
Fresco en el tramo crucial
A sus 32 años, Ronaldo ha puesto muy alto el listón. Después de encajar las críticas que hablaban de un declive, el portugués se ha levantado en una competición en la que huele la sangre. Antes de los cuartos ante el Bayern, Cristiano llevaba dos goles en ocho partidos de Champions: seis en la fase de grupos y dos frente al Nápoles.
«Me preparé para estar bien en la fase de final del campeonato y de la Champions», dijo Cristiano, al que las rotaciones de Zidane le han ayudado a llegar fresco al tramo final. «Cristiano es único», valoró el técnico francés. «Es el mejor jugador del mundo», afirmó Benzema.
Todos sus compañeros se rinden a Ronaldo, el hombre que ha llegado a los 400 goles en el Madrid en 389 partidos.
