El fichaje de Rubén Semedo no ha sido hasta la fecha el más rentable precisamente para el Villarreal. Su falta de adaptación a la Liga y una reciente lesión han impedido que el central pueda demostrar el nivel ofrecido en su etapa en el Sporting de Lisboa. Por si fuera poco, este mismo fichaje ha provocado que sus dos representantes, José Fouto y Catio Baldé, discutieran ayer jueves en Lisboa a cuenta de la comisión de su fichaje, que asciende a 1,4 millones de euros, el 10% de los 14 'kilos' que desembolsó el club amarillo.

Destacar que el Villarreal no es parte afectada en un conflicto que el citado agente Catio Baldé se encargó de airear públicamente en la prensa portuguesa, concretamente en el medio Sapodesporto. "Fouto me omitió la existencia de ese pago, porque tenía un acuerdo con Bruno de Carvalho (presidente del Sporting) para fraccionar la comisión en dos pagos de 700.000 euros. El primero fue abonado en septiembre", aseguró Baldé.

Mediteráneo se ha puesto en contacto con la segunda parte, el empresario español José Fouto, que ha contestado de esta manera a quien era (y legalmente todavía es), su socio a la hora de representar a Rubén Semedo. Fouto ha contestado lo siguiente: "En ningún momento hubo una pelea. Sí una discusión, porque este señor no entiende que en las negociaciones entre el Sporting y el Villarreal no intervino para nada. La negociación fue conducida por mí y por los agentes Federico Pastorello y Luca Bascherini, que somos los que llegamos al acuerdo con el Sporting por la comisión. Este señor no tiene derecho a nada, pero tiene problemas financieros después de abrir una escuela de fútbol en Guinea".

El propio José Fouto reconoce que lleva "conjuntamente la representación de Rubén Semedo" con Cacho Baldé y desconoce qué pasará en el futuro con este acuerdo: "Lo que tenemos firmado está cumplido. Ahora habrá que ver qué decisión toma el jugador".