El Valencia ha tirado la toalla por Bruno. A pesar de que en el día de ayer los agentes del jugador todavía insistían en la viabilidad de la operación, la entidad de Mestalla ha cambiado de objetivo al no poder superar la oferta de nueve millones de euros para hacerse con los servicios del centrocampista internacional.

Fernando Roig se mostró contundente en no aceptar la oferta valencianista, que no alcanzaba las exigencias solicitadas por el club para dejar salir al futbolista de Artana. Solo se había alcanzado un principio de acuerdo con los agentes del jugador respecto a las cantidades que podría percibir en el Valencia, pero faltaba otra de las patas de la negociación: la entente con el Villarreal.

MOVIMIENTO FALLIDO // La intromisión del Valencia en el caso Bruno, con la colaboración y el poco respeto hacia el Villarreal mostrado por los agentes del futbolista de Artana, se convirtieron en una especie de lobby de presión para forzar el traspaso por una cifra inferior a la solicitada por la entidad amarilla. No se midieron bien las fuerzas en ninguno de los dos casos. Al margen de las normas éticas de comportamiento, la normativa FIFA prohíbe taxativamente cualquier negociación con un futbolista perteneciente a otro club, hasta el 1 de enero del año en el que concluye su relación contractual con el equipo al que pertenece. No es el caso de Bruno Soriano, a quien le restan cuatro años con el Villarreal.

Después del rotundo no de Fernando Roig y de la inflexible postura acerca de la cifra marcada para la venta, el club che empezó a sondear otras opciones para la posición de mediocentro defensivo que pretende Mauricio Pellegrino. El nombre del centrocampista argentino Fernando Gago, con el que no cuenta Mourinho para su proyecto en el Real Madrid, es el mejor colocado como alternativa a Bruno Soriano.

No obstante, el Valencia no es el único club que ha efectuado una propuesta en serio por Bruno. El Spartak de Moscú, dirigido por el extécnico valencianista Unai Emery, también ha presentado una oferta formal por el centrocampista de Artana, que se acercaba a las exigencias del Villarreal. La primera tentativa fue desestimada por el propio futbolista amarillo, que no valoraba la posibilidad de abandonar España y que aún acariciaba la posibilidad de jugar la Champions en el Valencia, una opción que a día de hoy es ya imposible.

Pero Emery sigue insistiendo en Bruno Soriano para que le acompañe en su aventura por la Liga Premier de Rusia, consciente de la valía del jugador. En principio parece que tras frustrarse el traspaso al Valencia, su futuro se halla más ligado al Madrigal, aunque habrá que estar pendiente de una nueva intentona del Spartak para convencer al de Artana a base de un suculento contrato.

UN VALOR SEGURO // Ahora mismo, y pendientes de una nueva propuesta del equipo moscovita, el Villarreal se mantiene en su idea de contar con Bruno como uno de los grandes referentes del equipo para afrontar el regreso a Primera. Esa es la intención y solo una oferta irrechazable como la que llegó por Marco Ruben podría variar el caso Bruno. H