Brillante. El Villarreal B se reencontró con la victoria tras tres jornadas consecutivas empatando en un encuentro muy intenso en el que los amarillos rindieron a un gran nivel, sobre todo Iriome y Juanto, ya que entre ambos fabricaron los cuatro goles locales. El equipo de Planagumà no ganaba desde el 16 de diciembre, cuando se impuso por 2-1 al Yeclano en casa.

El Reus tuvo la primera gran ocasión con un cabezazo de Socías que acabó estrellándose en el larguero, pero fue el filial el que se adelantó rozando el primer cuarto de hora. Iriome recibió en banda, se deshizo de su par con tremenda habilidad y colocó un preciso centro al corazón del área para que Juanto anotara con un remate con su zurda al primer toque. Un bello tanto que inauguraba el luminoso.

POSIBLE PENALTI // De ahí hasta el final del primer acto ninguno de los dos equipos tuvo claras ocasiones de gol pese al intenso ritmo del encuentro, aunque sí que se produjeron dos acciones polémicas en el área del Reus. Primero, tras un centro de Fran García que impactó claramente en el brazo de Edu Vives (min. 33), y más tarde, con un agarrón de Beñat a José Ángel (min. 44). Ninguna de las dos acciones fue interpretada como penalti por el colegiado navarro Galech Apezteguía.

El partido se le puso de cara al Villarreal B en el inicio del segundo acto. El Reus se quedó en inferioridad numérica después de que Masqué viera su segunda cartulina amarilla por una entrada en la medular (min. 48) y unos segundos después llegó el 2-0. De nuevo Iriome se fue por banda derecha y centró raso para que Juanto, tras controlar en primera instancia, consiguiera marcar con un derechazo cruzado.

El Reus parecía rendido, pero nada más lejos de la realidad. En una jugada aislada Sergio León logró batir a Jorge Palatsí y le puso emoción a los minutos finales.Con los catalanes volcados llegó el 3-1 y con los mismos protagonistas de los dos primeros goles amarillos. Corría el minuto 87 cuando Iriome arrancó con potencia y colocó un pase interior por alto que Juanto no desaprovechó con un sutil toque.

El 4-1 definitivo lo fabricaron entre... Iriome y Juanto. El tinerfeño robó el balón, se escapó por velocidad y mandó un centro teledirigido para que Juanto hiciera su poker de goles al rematar con la cabeza en el segundo palo. Una conexión espectacular y una justa victoria del filial. H