En el Valencia se formó y dejó una huella que le valió vestir la camiseta de la selección española y un multimillonario traspaso al Inter. En Vila-real, Francisco Javier Farinós volvió a sentirse futbolista tras una complicada operación de cadera para vivir uno de los momentos más bonitos e intensos de su carrera: el último ascenso de los amarillos a Primera. El domingo, Fari ya no estará en el césped, pero vivirá con pasión un derbi del que ha sido muchas veces protagonista. Eso sí, en este estará del lado del Submarino, el equipo en que colgó las botas el pasado 11 de febrero, a punto de cumplir los 36 años, tras no poder recuperarse de una lesión en el tendón. “Siento que aún pertenezco al Villarreal”, confiesa.

--¿Cómo ve el partido?

--Un encuentro muy atractivo porque el Valencia realmente está muy bien, ha despertado, y el Villarreal necesita seguir sumando si no quiere descolgarse. Los dos quieren jugar a fútbol. Será espectacular.

--¿No cree que el ‘efecto Pizzi’ se ha quedado en ‘efecto gaseosa’?

--No se van a ganar todos los partidos. Pizzi ha dado un cambio al Valencia, pero dejó escapar muchos puntos al principio de su etapa y ahora es más complicado alcanzar el primer objetivo. Pero no se están descolgando y han mejorado bastante.

--¿Cómo ve al Villarreal?

--El Villarreal llega bien a la cita. El otro día, ante el Athletic, vimos un partido muy bonito hasta la expulsión de Gabriel. El Villarreal hizo lo que tenía que hacer para ganar el partido.

--¿Dónde puede estar la clave en el derbi del domingo?

--La clave para este tipo de partidos no la sabe nadie. Contra el Athletic te pitan un penalti, que podría ser decisivo, y lo paró Asenjo… Siempre dicen que quien marque primero tiene ventaja, pero el lunes se vio que tampoco. Para mí será fundamental que el Villarreal salga como el Villarreal. Si es fiel a sus principios puede hacer daño en Mestalla.

--¿Cree que el equipo amarillo ha dado un bajón?

--Creo que no. Es normal que pierda puntos; lo que no era normal era lo del principio de temporada. Ahora los veo muy bien y tienen hambre e ilusión por seguir haciendo cosas importantes.

--¿Ve al Villarreal peleando por la cuarta plaza hasta el final?

--En el fútbol todo puede pasar. Hay siete puntos de diferencia con la cuarta plaza, pero en dos o tres partidos se puede dar la vuelta a todo. Confío en que acaben cuartos. Les veo fuertes.

--¿Ahora es un aficionado más del Villarreal?

--La verdad es que solo me he perdido un partido en el Madrigal: al Valencia le sigo menos.

--¿Con quién irá el domingo?

--Con el Villarreal. No quiero que el Valencia pierda nunca, pero espero que el domingo gane el Villarreal por todo lo que he vivido allí. Guardo un gran recuerdo de todos los sitios en los que he estado, incluido el Valencia, por supuesto, pero tengo la sensación de que aún pertenezco al Villarreal y quiero verle en Champions.

--¿Le ha dejado huella su paso por el Villarreal?

--Hay clubs y vestuarios que te llegan más que otros, y en Villarreal se ha unido un grupo muy bueno, muy sano y he estado muy a gusto. Me han cuidado mucho.

--¿Le costó tomar la decisión de colgar las botas?

--Mucho. Tenía pensado que si en diciembre no estaba para jugar iba a levantar la mano y decir que ya estaba bien, pero seguí porque tenía la esperanza de ayudar al equipo en el último arreón. Pero bueno, ya tenemos una edad y me ha llegado así.

--¿Echa de menos la competición?

--Siempre me ha gustado entrenar y jugar a fútbol, pero sigo haciendo cosas para mantenerme en forma: gimnasio, elíptica, bicicleta… Hay que tener en cuenta que me estoy recuperando todavía del tendón.

--¿Se ve como entrenador?

--Primero me quiero formar. El fútbol me gusta, pero no sé en qué momento decidiré seguir porque necesitaba un descanso. Los últimos años he sufrido bastante.

--¿Qué se lleva del Villarreal?

--Todo. No solo el ascenso y las vivencias positivas. Mantengo el contacto con los jugadores y cuando voy al estadio suelo entrar en el vestuario. Me llevo, sobre todo, muchos amigos. H