La selección española remontó dos marcadores adversos frente a Kazajistán, sintió muy cerca el triunfo tanto en los últimos minutos como en la prórroga y logró el pase a la final de la Eurocopa en los penaltis, con una parada de Sedano y tres tiros infalibles de Miguelín, Ortiz y Lin.

Mañana espera el partido definitivo contra Ricardinho y Portugal, el último desafío hacia el título y el enésimo reto de la Roja, ganadora del torneo en 1996, 2001, 2005, 2007, 2010, 2012 y 2016 y una de las dos únicas aspirantes ya al triunfo en 2018, después de un ejercicio de carácter contra el equipo kazajo.

España superó un comienzo irregular. Sometido por el control de su adversario, con Paco Sedano entonces como el mejor hombre sobre la pista, con paradas frente a Taynan, Yesenamanov o Zhamankulov, también debió levantar un gol en contra, anotado por Taynan, llegando al descanso con ventaja (1-2).