España se queda sin margen de error. Tras la inesperada derrota de Pablo Carreño en la primera jornada, ayer Croacia volvió a dar la sorpresa. Marin Draganja y Nikola Mektic se impusieron en cinco sets a Marc López y Feliciano López: 6-7(6), 7-6(7), 7-6(5), 2-6 y 6-4. Así, dejan a los locales a un triunfo de los cuartos y a España, a un paso de la eliminación y volver a luchar por la permanencia.

Rober tendrá, pues, la responsabilidad de igualar la eliminatoria y forzar el quinto punto, en el duelo que abrirá la jornada de hoy. El rival del castellonense será el número uno croata, Franko Skugor, ante el que Bautista tratará de sumar el segundo punto para España, tras el que ya logró el viernes al imponerse a Ante Pavic (le derrotó en tres mangas).

El dúo español, campeón de Roland Garros y Doha el pasado año y finalista en Dubái, no pudo plasmar la superioridad teórica que marca el ránking ATP ante unos adversarios que jugaron mejor sus opciones, estuvieron menos irregulares y esperaron cada momento oportuno para hacer daño a los rivales.

Tanto en individuales como en dobles, España no ha estado al nivel esperado. Solo Bautista cumplió tal y como se esperaba. Carreño desperdició tres puntos de partido el viernes. Y ayer, el dobles, sin estar a un gran nivel, echó por tierra las ocasiones que tuvo a su favor en Osijek.

España echó de menos la habitual contundencia de Feliciano en el servicio. Estuvo irregular el toledano, que entró en el equipo a última hora para ocupar el lugar de un cansado Rafa Nadal.

El cuadro español, en desventaja desde el principio, equilibró la primera manga, que se apuntó en el tie break. La igualdad se mantuvo en el segundo parcial, que el cuadro español pudo anotarse también, pero desperdició un punto de set al resto. Croacia salió airoso y alargó la situación al desempate, que ganó por 9-7.

INCÓMODOS / Casi siempre se vio a contracorriente a España. Ocurrió también en el tercero. Siempre por detrás, llegó a duras penas a otro tie break, que proporcionó el éxito a los locales. Aun así, y sin jugar, Marc y Feliciano reaccionaron. Rompieron de entrada el servicio de Croacia y abrieron brecha. Conservó la diferencia el equipo español mientras los locales reservaron fuerzas.

En la manga final, Feliciano volvió a perder el saque. El equipo croata se situó con 2-0 y una gran dosis de tranquilidad. Mantuvo el servicio en cada ocasión hasta cerrar el partido después de cuatro horas y 24 minutos.