Anda el aficionado del Villarreal preocupado por si se conseguirà o no la sexta plaza. Un gran objetivo tal y como están las cosas, jugando con medio equipo e inmersos en plena crisis de jugadores. El ritmo de las lesiones ya es insufrible, uno por partido. Así que lo que me planteo es la preocupación de Marcelino. Ni midiendo las fuerzas de los disponibles que tiene (ayer fue el recuperado Vietto) puede esquivar la mala suerte. A día de hoy solo hay 14 jugadores del primer equipo. Así que no entiendo algunas de las críticas que se le hacen al técnico.

El final de temporada se presume más sufrido de lo esperado y sin posibilidad de especular con las alineaciones. Y con todo, el Villarreal mantiene las diferencias con sus perseguidores, aunque hoy pueda reducirlas el Málaga.

Contra las dudas, la esperanza sigue viva. Ayer Jaume Costa, un jugador que vive lejos de los grandes reconocimientos, marcó un golazo que mantiene viva la sexta plaza. Lástima que la diana solo dio la victoria momentánea durante 60 segundos. ¡Hasta en eso no acompaña la suerte! Jaume es un jugador cercano y solidario que está cuajando una gran campaña. Su espíritu, bien sea de lateral, de interior o de delantero, encarna y debe ser la guía y el ejemplo para encarar los tres partidos que quedan. Por cierto, que los dos próximos y vitales se juegan en el Madrigal. Y ahí sí, ustedes también juegan. H