Las sospechas sobre un funcionamiento insano en el seno de la FIFA quedaron confirmadas cuando agentes de Estados Unidos irrumpieron en el lujoso Hotel Baur au Lac de Zúrich y detuvieron a siete personas de las 14 que están acusadas de casos de corrupción.

Los presuntos delincuentes ya estaban en Suiza para la votación de mañana en el que se elige un nuevo presidente. O a Joseph Blatter (79 años, en el cargo desde 1998) o el joven Ali Bin Al Hussein (39 años), príncipe de Jordania y vicepresidente del organismo en representación de Asia.

HABRÁ ELECCIONES // Las elecciones se celebrarán como si nada hubiera pasado. La duda que surge es si lo mucho que pasó ayer será suficiente para cambiar los pronósticos que apuntan a un quinto mandato de Blatter, que ha visto despejado el camino por la retirada de dos candidatos que amenazaban su triunfo: el holandés Michael van Praag y el portugués Luis Figo. Al Hussein cuenta con apoyos de las federaciones de Asia y África.

“El presidente Blatter no está involucrado en esto”, dijo Walter de Gregorio, el portavoz de la FIFA, “ni tampoco el secretario general Jerome Walcke”, añadió, garantizando que el congreso y las elecciones no se aplazarían. H