Solo la Vuelta a España, que cumplirá este año 72 años, cuenta con más historia en el territorio nacional como carrera ciclista que el Gran Premio Vila-real-Morella, que ayer presentó su 71 edición. Pues bien, en su dilatada historia, nunca había contado esta carrera con tantos equipos y ciclistas como ahora. «Nos ha costado mucho, pero la respuesta ha sido muy buena», recalca desde la organización Pascual Falcó.

En la presente edición competirá, al margen de conjuntos llegados de todo el territorio nacional, el Lokosphink ruso. Al ser cuestionado por los favoritos, Falcó subraya precisamente al conjunto del este de Europa, así como al Lizarte navarro —filial del Movistar—, Fundación Euskadi o el Aldro Team de Manolo Saiz.

UNA INTENSA AGENDA // Las 16 escuadras recorrerán este viernes 5 los 148 kilómetros que separan Vila-real de Morella, en un trayecto que contará con el apoyo de alrededor de 250 personas.

La concejala de Deportes de Vila-real, Silvia Gómez, y el responsable de la organización, Pascual Falcó, pusieron la voz ayer a una carrera que contará con una presentación oficial este jueves, en la que todos los vecinos que lo deseen podrán sumarse al paseo en bici por la ciudad que realizarán los equipos participantes y en el que habrá regalos.

El pistoletazo de salida de la prueba tendrá lugar el viernes a las 13.30 horas en la Plaça Major. «Un lugar céntrico al que esperamos se acerquen muchos vecinos para dar ánimos a todos los participantes y en el que se repartirán pegatinas», afirma Gómez.

Al margen de los corredores, Falcó subrayó la presencia de «medio centenar de coches entre los de cada equipo y de la organización, además de 40 motos de la organización y de la Guardia Civil, así como dos ambulancias y un equipo médico de apoyo”.

La segunda jornada, el sábado 6, será la del regreso, en la que los participantes pondrán rumbo de nuevo a Vila-real, con un trayecto de 139 kilómetros, y llegarán previsiblemente sobre las 13.00 horas a la plaza del Llaurador.

Allí, igual que en la plaza Major en los días previos, habrá una mesa de Aspanion, con cuyo proyecto Pintando el camino en rosa se involucra la organización y que ayuda a niños con cáncer.