Victoria trabajada e importante de cara a no pasar apuros clasificatorios de unos graueros que pudieron matar el partido en la segunda parte pero no tuvieron el acierto suficiente y acabaron sufriendo hasta el último minuto. El Club La Vall, por su parte, fue un equipo muy competitivo y correoso que no resultó fácil de batir y tuvo sus opciones de empatar hasta el final. La gran actuación del portero juvenil Juliá evitó una mayor renta para los locales, mérito también el del club visitante, que alineó cinco juveniles y un cadete.

Tras un primer tiempo equilibrado, en el que cualquiera pudo adelantarse, aunque los locales fueron algo más incisivos, en la reanudación marcaron los pupilos de Pepo Amposta y Juanjo Edo en una buena jugada de ataque culminada por Ferrán en el minuto 52. A partir de aquí los locales trataron de matar el resultado y los visitantes buscaron el empate con contragolpes, pero sin efectividad excesiva por parte de sus delanteros, que se encontraron con la buena defensa local.