Cavenaghi, Pandiani, Hernán Pérez, Uche y compañía tendrán que superar el sábado a un viejo conocido del Villarreal, Mariano Barbosa. El ahora portero del Las Palmas quiere superar la mala racha de resultados que sufre el equipo insular y piensa que “el mejor momento para revertirlo” es en la visita de su exequipo.

--Después del 5-0 encajado en Girona, será mal momento para recibir al Villarreal...

--Los resultados están siendo negativos y la gente aquí es muy visceral, pero debemos cambiar nuestra imagen y encima en casa, porque la afición siempre responde. La clave está en olvidarse de lo que pasó, son cosas de fútbol. El sábado nos jugamos la vida y aunque el rival lo haya ganado casi todo, no podemos fallar.

--Esta es su tercera temporada en Las Palmas, así que conoce bien la categoría. ¿Qué diferencias hay con Primera?

--Creo que es una categoría muy complicada, cualquiera puede ganar a cualquiera. El Villarreal tiene un equipazo, pero no será fácil que suba. Jugará en campos complicados, feos, pequeños y que juegan muy diferente; el primer año que vine nos ganaban con dos cosas, pegando patadón para arriba. En Primera está todo más marcado y suele ganar el mejor, aquí las diferencias se reducen mucho.

--¿Qué opinión le merece el Villarreal? ¿Se ha reforzado bien?

--Creo que se ha armado bien el equipo, han sido inteligentes y han aprovechado a los jugadores del filial que conocen ya la categoría y saben lo que hacen. Además, refuerzos como Pandiani y Cavenaghi son muy importantes.

--Lo tendrán difícil para ganar...

--Podemos plantarles cara. Tenemos un equipo muy joven, pero el año pasado tampoco teníamos figuras y siempre dimos la talla.

--¿Qué recuerda de su paso por el Villarreal? ¿Cree que dejó pasar un tren importante?

--La experiencia me cogió muy joven, con 20 años nunca había salido de casa y me cambió la vida de la noche a la mañana. Fue un cúmulo de cosas que no supe asimilar con esa edad, así que cometí errores y me equivoqué muchas veces, no pude aprovechar esa oportunidad. Seguro que si me llegara ahora, más centrado, no la dejaría pasar.

--¿Guarda buen recuerdo del club? ¿Conserva muchos amigos de su estancia aquí?

--Mi mujer es de Vila-real y todos los veranos estoy en Benicàssim. Tengo muchos amigos y la gente del club también me ha tratado siempre muy bien. El Villarreal fue quien me abrió las puertas de Europa y siempre le estaré agradecido.

--¿Cómo llegó al Las Palmas?

--Estuve un año en México, pero tenía claro que debía volver a España, me salió la oportunidad de llegar aquí de la mano de gente que conocía, como Óscar Arias o Javi Guerrero, y no me lo pensé. H