El 2-0 del sábado en el Martínez Valero dejó algo tocado al Mini Submarino, pero ni mucho menos hundido. Una vez analizado el choque de ida de la final por el ascenso a Segunda A —«no merecimos ese marcador», apunta el capitán, Juan Ibiza—, los de Miguel Álvarez ya han pasado página para empezar a preparar la batalla del próximo sábado, en la que los groguets están convencidos de que tienen todas las armas para poder devolver a los ilicitanos los dos goles de la ida.

La principal, el apoyo de un Mini Estadi que los jugadores del Villarreal B quieren ver lleno. «Este equipo y afición, juntos, podemos conseguirlo», arenga Chuca, esgrimiendo que los 90 minutos en el Mini se le pueden hacer muy largos al Elche.

EJEMPLOS A SEGUIR / El filial ya ha sido capaz esta misma temporada de registrar marcadores que serían válidos en la vuelta del sábado para revertir la eliminatoria. El 2-0 ante el Cornellà y el Ebro y, por supuesto, 5-0 frente al Ontinyent —todos ellos equipos que acabaron entre los seis primeros de la liga regular en el grupo III de 2ª B— o el 2-0 ante el Fuanlabrada de la anterior ronda son algunos espejos donde mirarse. «Sabemos que tenemos un marcador duro, pero no imposible», indica Chuca, que promete que los jugadores del Villarreal B «vamos a dejarlo todo por esta camiseta y por la gente que está a nuestro lado».

Álvarez tendrá de nuevo a toda la plantilla —excepto Ramiro— para intentar la gesta. «Ahora tenemos que centrarnos en preparar bien la semana para buscar una remontada que merecemos por nuestra gran temporada», recalca Juan Ibiza.