Florentino Pérez se ha vuelto ahorrador. El mercado se ha cerrado y el presidente blanco apenas se ha rascado el bolsillo. Nadie podía imaginárselo cuando, a propósito de la carrera por el fichaje de Paul Pogba, alimentó las esperanzas de Zidane de contar con el centrocampista. “Estamos enredando un poco. Todavía no hay nada cerrado”, confesó al técnico a finales de julio. Zizou no pudo menos que confiar en que su jefe volvería a estirarse para completar su álbum. Resulta, sin embargo, que Florentino considera que no solo tiene el álbum completo, sino que tiene repetida alguna que otra figura.
Pogba no llegó porque, por una vez y sin que sirva de precedente, Pérez no entró al trapo en una puja desproporcionada. James se queda e Isco, el último que tenía más papeletas para salir, también, pese a que en las últimas horas se multiplicaron los rumores en torno a una cesión al Málaga o un traspaso al Tottenham de Pochettino, las últimas opciones de salida para el interior que se sumaron a las que ya habían circulado: Milan, Chelsea, Juventus, Arsenal y PSG, entre otras. H
