Gabriel no arroja la toalla. A pesar de que no ha podido entrenar con el resto de jugadores a disposición de Marcelino en las dos primeras sesiones destinadas a preparar el partido ante el Getafe, la de ayer y la del pasado lunes, el central brasileño asegura que hará todo lo que esté en su mano para poder estar el próximo domingo sobre el césped del Madrigal para ayudar a su equipo. Gabriel se resintió en el último partido de Liga, en Cornellà, de unas molestias en el gemelo izquierdo que arrastraba desde la cita de Europa League en Zúrich.

El optimismo de Gabriel se basa en sus sensaciones en los últimos días, tras una pasada semana “difícil, con mucho dolor”, decía ayer el defensa del Submarino. Hoy puede ser el día clave para despejar incógnitas. Tras dos días trabajando en solitario en el gimnasio con los recuperadores, el brasileño se probará. “Entrenaré con el grupo para ver si puedo jugar. Tengo muchas ganas de estar ante el Getafe y lo voy a intentar. Trabajaré para estar disponible para el míster”, apunta Gabriel.

Las ganas de reaparecer no son gratuitas. Gabriel sabe que las bajas hacen casi vital su concurso en un próximo mes “con muchos partidos” en Liga, Europa y Copa. “Además no tenemos a Mateo (Musacchio) y es más complicado; vamos acumulando cansancio”, puntualiza el central, que de dar hoy el OK al cuerpo técnico podría formar pareja defensiva con Víctor Ruiz ante el Getafe; Chechu Dorado estará al quite.

Aunque fiel a la filosofía del partido a partido, Gabriel quiere ser protagonista activo en el inminente reto: “Llegar a Navidad cerca de los puestos altos y clasificados en la Europa League”. H