El Barça domina la Liga con siete puntos de ventaja y el Chelsea malvive en la Premier, cuarto a 19 puntos del City. El cuadro inglés solo ha ganado 3 de los 11 encuentros disputados en el 2018 y el azulgrana ha vencido en 8 de 11. El equilibrio que se barruntaba cuando el sorteo de la Champions deparó ese explosivo emparejamiento, el más morboso de octavos, parece disiparse por el declive que apunta el conjunto de Conte. Una sensación que no debería guiar el planteamiento barcelonista antes de estrenar la eliminatoria.

«Sé que hay un ambiente muy positivo y muy favorable y se dice que tiene muy buena pinta esta temporada pero hay que ser prudentes, más que nunca», expuso Gerard Piqué ayer, en un acto de uno de los patrocinadores del club azulgrana, Beko.

Asumiendo que el Barça es favorito en la eliminatoria, el futbolista abogó por calzarse botas de plomo. «Hay que aprender de la experiencia de los últimos años y podemos estar muy bien, pero con el Chelsea puedes tener un mal día, con un mal resultado, y lo que pinta un buen año se convierte en uno malo», analizó el central ante la visita el próximo martes a Stamford Bridge.