Para el capitán del Villarreal la de ayer fue una jornada perfecta. Y no tan solo porque el Villarreal dejara de lado la sequía de triunfos desde el inicio del 2017, o porque el propio Bruno abriera el camino del triunfo con su cuarto gol de la temporada. Además, el de Artana sabía que el Submarino le debía algo a su afición.

«Sabíamos que después del partido ante el Valencia teníamos que mejorar en casa para que la gente se sintiera de nuevo orgullosa del equipo», explicó tras el 2-0 ante el Granada, un marcador que tuvo una de las claves en que, ayer sí, «todos tiramos en la misma dirección». «Somos un equipo en el que si hay un compañero que no corre lo notamos muchísimo», añadía el centrocampista, que prefirió no opinar de la inminente salida de Pato y sí centrarse «en los delanteros que tenemos ahora en el equipo». «Adrián ha venido con muchas ganas y en los minutos que ha tenido ha estado acertado, con movilidad. Si los delanteros corren y crean opciones, a los mediocentros no es más fácil encontrar buenas opciones de pase», explicó el capitán, autor de un 1-0 en el que funcionó la pizarra: «Era una jugada ensayada del míster. Durante la semana trabajamos la estrategia y ha salido».

A pesar de los tres puntos, Bruno considera que el Villarreal todavía está en proceso de mejora. «Con el 0-0 nos cuesta más. Parece que con media ocasión que nos haga el rival empieza el run run en la grada. Cuando nos ponemos por delante somos un equipo más intenso», reconoce el capitán.

Por su parte, Escribá destacó la «seriedad» del equipo, sobre todo en defensa, donde destacó el papel de Bonera, que se estrenaba en la Liga: «Aunque pueda estar con menos ritmo que otros compañeros ha protagonizado un partido inteligente y completísimo. Es un hombre que manda y nos genera mucha confianza atrás».

EL ENFADO CON SORIANO / Menos contento se fue ayer el técnico con un compatriota del central, Soriano, que se llevó la reprimenda de Fran Escribá por su amarilla que acarrea suspensión: «No podemos protestar 30 segundos una jugada. Ese tipo de tarjetas no ayudan nada al equipo. Le he dicho que sea la primera y espero que la última».