Islandia admiraba a Inglaterra no hace mucho, pero su progresión en el fútbol mundial, digna de estudio, le ha llevado a eliminar a los pross en los octavos de final de la Eurocopa (1-2). Los vikingos, con el fútbol tradicional británico, sigue haciendo historia: están en cuartos de final, donde se cruzan con la anfitriona, Francia.

Todo sucedió en poco más de un cuarto de hora, el del arranque del encuentro en Niza. Rooney transformó un riguroso penalti cometido por Halldórsson (min. 4), pero los de Roy Hogdson todavía lo celebraban cuando una rudimentaria acción de vikinga, nacida en un saque de banda, permitió que Ragnar Sigurdsson estableciera el empate.

Islandia continuó a lo suyo y, en el 18, Sightórsson completaba la remontada, para asombro de todo el mundo. Con todo, aún quedaba más de una hora.

Inglaterra, que ya había sufrido en la fase previa (empató con Rusia y Eslovaquia, ganando a Gales por los pelos), tenía tiempo y recursos, aparentemente, para evitar la mayor sorpresa del torneo, por encima, incluso, de algunos de los resultados de la liguilla, permitiendo la clasificación de Hungría, Irlanda del Norte...

HUMILDAD // Porque, en esta cita, las hazañas están reservadas para una selección, que no hace mucho, celebraba no perder de goleada. A base de fe y coraje, pero también de buen juego, derrotó a una Inglaterra volvió a ser incapaz de aproximarse a sus propias y exageradas expectativas.

Islandia peleará contra la anfitriona por un puesto en semifinales. El conjunto escandinavo ha dejado de ser una anécdota en la competición. Así, lo que al principio era una situación simpática con la clasificación para la fase final primero y, después, para las eliminatorias, ha terminado por ser una heroicidad que ha movido a un país entero.

El equipo de Hogdson, que no seguirá en el cargo, se lanzó con todo sobre la meta islandesa y acumuló disparos desde fuera del área, pero siempre imprecisos. Islandia no se parapetó en el 1-2, ya que continuó buscando a Hart, en la búsqueda de otro gol que ahorrase su sufrimiento final, que fue bienvenido con la clasificación para cuartos. H