Lunes por la tarde: el caprichoso bombo empareja a Linares y Castellón en la lucha por el ascenso, primero en territorio jiennense. Empieza a movilizarse la afición albinegra, que pese a la lejanía (casi 500 kilómetros), tampoco va a dejar solos a los suyos en el primer asalto de la eliminatoria. Más de 600 orelluts arroparán a los de Calderé en Linarejos.
Las redes sociales han bautizado este desplazamiento de una forma muy castellonera: mone a Linares. Precisamente, este canal de comunicación han propiciado inusuales compañeros de viaje: hay quien ha puesto su vehículo a disposición de los que no lo tienen y otros han encontrado transporte de la misma forma, compartiendo gastos. Además, el club ha completado un autobús y al menos otros dos colectivos han contratado los suyos propios.
La inmensa mayoría hará el viaje de ida y vuelta este mismo sábado. Algunos, en cambio, han pernoctado o lo harán está próxima noche en la localidad minera, cuya mejor embajadora, al menos desde el punto de vista turístico y culinario, son las tapas. Si hay tiempo y ganas, a lucir la albinegra por las calles y plazas de una ciudad cuyo germen fue la íbera Cástulo. Luego, cómo no, a dejarse el alma en Linarejos (todo apunta a que no se completará su aforo para 10.000 espectadores).
Para los que no vayan, siempre les queda seguirlo a través de las redes sociales o las retransmisiones de Voramar EsRadio, Cadena Cope Castellón o Vox UJI Ràdio.
Además, los socios podrán canjear los cupones por las entradas para la vuelta (domingo 31, a las 19.00 horas) desde el lunes. H
