El Murcia baja a Segunda B y el Racing podrá mantener la categoría en Segunda A... si documenta cómo ha llevado a cabo el aplazamiento de la deuda, según informó en un comunicado, ayer, la Liga de Fútbol Profesional (LFP).

Tras examinar la documentación presentada por el club grana, los servicios técnicos de la LFP apreciaron “el incumplimiento de los requisitos exigidos para su inscripción en la LFP, de conformidad con lo previsto en los artículos 54 y 55 de los estatutos sociales”, explicó el organismo presidido por Javier Tebas. El incumplimiento de los ratios económico-financieros exigidos por la LFP se traduce en el descenso de los pimentoneros a la tercera categoría del fútbol español.

Por su parte, la entidad cántabra “tiene un plazo improrrogable de cinco días naturales” para presentar ante la LFP “información económico-financiera adicional” a la enviada el jueves por los responsables del club, donde acreditaban el cumplimiento de los requisitos económicos.

7 DE AGOSTO // “En la próxima comisión delegada de la LFP, que tendrá lugar el 7 de agosto, se someterá, para su ulterior ratificación en su caso, la decisión tomada al respecto de ambas entidades”, concluye el comunicado.

Tebas aseguró que fue “el propio Murcia quien reconoce que no puede cumplir los ratios” exigidos para su inscripción en la Segunda A. El presidente de la LFP sí confía en que el Racing pueda participar en la Liga Adelante, “si acredita cómo y de qué forma ha conseguido aplazar la deuda”.

La LFP exige que el importe de la deuda de un club de Primera o Segunda A, dividido por los ingresos, no exceda de 4,5, pero en el caso del Murcia esa cifra llega a 5,8 (35 millones de euros de deuda y 6 millones de ingresos). El club grana ha solicitado a la comisión delegada de la LFP que deje sin efecto esta exigencia, según ha confirmado Víctor Alonso, gerente de la entidad, para, así, salir a competir a 2ª A. H