Olof Mellberg quiere ser protagonista en esta ultimísima recta final de la temporada para el Villarreal. De forma inmediata, el veterano central sueco de 35 años no tiene más remedio, puesto que se ha quedado como el único central disponible para la batalla del próximo domingo en el Santo Domingo de Alcorcón de los tres habituales --Mateo Musacchio cumplirá sanción por acumulación de tarjetas amarillas y Chechu Dorado apura su recuperación-- desde la llegada de Marcelino al banquillo amarillo.

RITMO DE JUEGO // Mellberg está viviendo una temporada irregular en esta su primera experiencia en Segunda División por culpa de los problemas físicos que le han ido castigando durante la competición -“he jugado muy pocos partidos en los últimos meses entre lesiones y presencias en el banquillo, lo que me ha impedido tener el ritmo necesario”, explica-- y que le han impedido confirmar todo lo bueno apuntado en el arranque de la temporada. Pero a la hora de la verdad asume la cuota de responsabilidad que corresponde a un futbolista con su amplio y exitoso historial, con más de 100 partidos internacionales con su selección nacional, presencia destacada en mundiales y eurocopas y una dilatada trayectoria profesional siempre en las categorías de élite de grandes ligas como Inglaterra, España o Italia y, antes de llegar al Submarino amarillo, Grecia.

“Sé que debo ser importante en los cinco partidos que quedan hasta final de Liga”, confirma Olof Mellberg, que poco a poco -“ante el Elche ya me encontré un poco mejor físicamente”, dice-- va encontrando el punto de forma idóneo para poder estar “al cien por cien” en las cinco finalísimas que faltan hasta el 9 de junio, la fecha hasta la que todo apunta que se puede alargar el desenlace definitivo de esta Liga Adelante.

OBJETIVO INNEGOCIABLE // El carácter competitivo del futbolista sueco le impide pensar en otro reto que no sea el ascenso directo a pesar de los cinco puntos de desventaja con el Girona. Su apuesta por el pleno al 15 --todos los puntos ante el Alcorcón, Girona, Xerez, Barcelona B y Almería-- es innegociable: “El objetivo no puede ser otro que ganar los próximos cinco partidos y pelear por el segundo puesto”.

La última derrota ante el Elche es, para Mellberg, un toque de atención para afrontar el final de Liga y una lección de lo que deben y no deben hacer los amarillos para no echar por la borda sus opciones de estar en Primera División por la vía rápida. “Ya hemos visto que debemos estar muy atentos contra equipos que, como el Elche, juegan muy cerrados y son peligrosos a la contra. Tenemos que coger como modelo la primera parte del pasado domingo, en la que estuvimos al nivel que queremos, y mantener la concentración durante los 90 minutos”, analiza el defensa.