Yo estuve allí». Es lo que dicen hoy muchos aficionados del Villarreal cuando recuerdan los grandes partidos disputados en el Estadio de la Cerámica los últimos tiempos. Quién no recuerda las eliminatorias ante Inter de Milán, Arsenal, Nápoles, Celtic... Quién no ha rememorado en alguna ocasión el gol de Pereira que sirvió para consumar el retorno a Primera. Quién ha olvidado el subcampeonato de Liga conseguido hace una década...

Hoy es uno de esos días que puede quedar marcado con letras de oro en la historia del Villarreal. Llega el Olympique de Lyón con todo su elenco de estrellas y con un gran resultado conseguido en el partido de ida de dieciseisavos de Europa League (3-1). Enfrente estarán las no menos estrellas del Villarreal, que a diferencia de lo sucedido hace una semana en tierras francesas estarán acompañadas por miles de groguets prestos y dispuestos a celebrar una gesta (19.00 horas).

QUE NO FALTE NADIE

Javi Calleja y Manu Trigueros incidieron ayer en la importancia de la afición para consumar la remontada frente al conjunto galo. Se espera hoy un multitudinario recibimiento al autobús del equipo al estadio (sobre las 17.20 horas) y el ambientazo en la grada de las grandes noches europeas, aunque los protagonistas no eluden su responsabilidad: «Tenemos que contagiar a la gente. Los primeros en creer somos nosotros».

Lo cierto es que el Villarreal no está pasando a día de hoy por su mejor momento, como demuestran las tres derrotas y el empate cosechados los cuatro últimos partidos. Sin embargo, este mismo equipo ha sido capaz esta temporada de remontar desde la 14ª posición hasta rozar los puestos Champions en Liga, donde ha conseguido además ganar en campos como el Bernabéu o Mestalla, y de pasar holgadamente como primero de grupo en la presente edición de Europa League.

Tiene por tanto el Villarreal crédito sobrado como para pensar en que sí se puede levantar la eliminatoria contra el Olympique de Lyón, y esta tarde debe demostrarlo en un partido en el que el margen de error, teniendo en cuenta el resultado adverso del partido de ida, es mínimo.

El Submarino debe marcar al menos dos goles y confiar en que los Fekir, Mariano, Traoré, Depay y compañía no tengan su mejor tarde. Tampoco el Olympique, que viene de empatar en su Liga contra Burdeos, Mónaco y Rennes, así como de empatar frente al Lille, pasa por su mejor momento, así que los amarillos tendrán que emplearse a fondo para ahondar en sus flaquezas y minimizar al máximo sus virtudes.

UN ONCE DEFINIDO

Para conseguir una nueva machada continental, Javi Calleja no se guardará nada. El técnico podría alinear un once de gala, integrado por Sergio Asenjo en la portería, al que acompañarán en defensa Mario, Álvaro, Víctor Ruiz y Jaume Costa. En el centro del campo formaría con Rodrigo como pivote, con Trigueros y Samu Castillejo en las bandas, a los que acompañaría Pablo Fornals en la punta de ese rombo. La pareja ofensiva la formarían el turco Enes Ünal y el colombiano Carlos Bacca, con opciones para Cheryshev, que fue titular en el Groupama Stadium.

Por su parte, el Olympique, que marcha cuarto en Francia y llega con la defensa señalada y algunos problemas en el vestuario, no contará con uno de sus defensores titulares, el lateral zurdo brasileño Marçal, sancionado por la amarilla que vio en la ida. Han regresado a la lista de 21 jugadores el delantero Maxwel Cornet y el lateral Kenny Tete.

ANIMACIÓN

La afición debe ser hoy protagonista de una nueva gesta. Con este objetivo, desde la Agrupació de Penyes piden a los ‘groguets’ que reciban al bus del equipo con banderas, bufandas y bombos. A las 17.00 horas han quedado en la sede para que comience la animación. Además, han puesto en marcha la iniciativa para que los escolares de Vila-real acudan al campo al terminar las clases, animando también al equipo a su llegada. Ya en el campo habrá bufandeo cuando salga el Villarreal.