Rúben Semedo evitó en el último momento el duro trago de tener que sentarse ayer en el banquillo de los acusados en el juicio por el delito más leve de los presuntos que se le han imputado en los últimos meses, homicidio en grado de tentativa, lesiones, amenazas, detención ilegal, tenencia ilícita de armas y robo con violencia. El central, suspendido de empleo y sueldo por el Villarreal tras ingresar en prisión preventiva el pasado 22 de febrero, llegó a la Ciudad de la Justicia esposado y ataviado con un chándal para hacer frente al juicio por la agresión a una persona que declaró que Semedo le propinó un botellazo en la cabeza en el exterior de una discoteca de València, en octubre del pasado año.

La sesión no llegó a llevarse a cabo —anteriormente Semedo ya consiguió, mediante acuerdos económicos, que otras dos personas retiran otras denuncias por amenazas y maltrato—, ya que el nuevo abogado del portugués, Jorge Albertini, llegó a un acuerdo extrajudicial con la supuesta víctima para retirar la denuncia y cerrar el primer proceso judicial en contra del jugador.

Tras solventar este primer problema judicial, el representante del futbolista centra ahora sus esfuerzos en conseguir que la jueza que instruye el caso más grave, el denunciado por un hombre que declaró haber sido «atado, golpeado y retenido por Semedo y otros dos acompañantes» en el chalé del defensa en Bétera, reconsidere la decisión de mantener en la cárcel a Semedo y le otorgue la libertad provisional bajo fianza. «Ya está en trámite el recurso por el que solicitamos la libertad, proponiendo el pago de una fianza, la retirada del pasaporte y que Rúben Semedo vaya a firmar cuantas veces sea necesario al juzgado para acreditar que nunca va a evadir la acción de la justicia», explicó el abogado Jorge Albertini, que se mantiene en la postura de que la causa que mantiene encerrado a su cliente «está basada en hechos infundados» y que fue el propio Semedo la víctima de una estafa.

¿CULPABLE O VÍCTIMA? / «¿Qué necesidad tiene mi cliente de atar, golpear y robar a una persona por cinco mil euros? ¿En serio que por cinco mil euros va a actuar como un vulgar delincuente, como el jefe de una organización criminal? No es cierto», razonó Albertini, que también críticó el juicio previo por el que ha pasado el futbolista, entre otros por el propio club de Semedo, el Villarreal: «Por una mera declaración mi cliente está en prisión provisional desde hace tres meses y el club al que ha representado de manera ejemplar le ha suspendido de salario. Ya se le da por condenado y nadie valora que solo la declaración no puede ser una prueba válida».

Semedo espera ahora la decisión de la jueza para poder salir de la cárcel y recuperar cierta normalidad en su vida.