El catalán Quim Salarich, que debutaba en unos Juegos Olímpicos, no se clasificó en el eslalon del esquí alpino de los Juegos de Pyeongchang, prueba que se disputó este jueves en la estación surcoreana de Yongpyong y que concluyó con el triunfo del sueco Andre Myhrer.

Salarich, que era 33º tras la primera manga (en la que se había salido de recorrido tras una caída el otro español en competición, el vasco Juan del Campo), no pudo completar el recorrido en la segunda bajada, por lo que España no tuvo ningún representante en la clasificación final del eslalon en los Juegos. Del Campo también se salió en la segunda manga en el gigante del pasado domingo, en el que Salarich no participó.

Juan del Campo, en la caída sufrida en el eslalon olímpico. / FABRICE COFFRINI (AFP)

EL CAMPEÓN MÁS VETERANO

El sueco Andre Myhrer se proclamó campeón del eslalon, el más veterano de la historia, al aprovecharse de las salidas de pista del gran favorito, el austriaco Marcel Hirscher, y del segundo candidato, el noruego Henrik Kristoffersen.

Myhrer, de 35 años, sucedió en el historial al austriaco Mario Matt, al que también relevó en su condición de campeón olímpico de eslalon de más edad. En una prueba en la que el hermano menor de éste, Michael, capturó el bronce, por detrás del también sorprendente medallista de plata, el suizo Ramon Zenhäusern. Mario Matt había festejado su título olímpico de eslalon a los 34 años, al ganar en los Juegos de Sochi 2014 (Rusia) una prueba en la que su compatriota Marcel Hirscher se colgó al pecho la plata.

Andre Myhrer celebra su victoria en el eslalon. / VASSIL DONEV (EFE)

Plusmarquista de triunfos en la general de la Copa del Mundo, tras ganar las últimas seis ediciones de una competición que lidera de forma holgada esta temporada, Hirscher, de 28 años, llegó a Corea del Sur con el único propósito de cerrar el círculo y llevarse a casa el único trofeo que le faltaba en su extenso palmarés: el oro en unos Juegos.

SALIDAS DE HIRSCHER Y KRISTOFFERSEN

Un objetivo que ya había cumplido con creces, al ganar combinada y gigante. Pero cuando la gran mayoría de los amantes del esquí alpino deseaban que ganase un tercer oro en los Juegos de Pyeongchang -que igualaría su gesta a las de su compatriota Toni Sailer, en los de Cortina d'Ampezzo-56 (Italia); y el francés Jean-Claude Killy, en los de Grenoble-68 (Francia)-, el astro salzburgués se salió de pista en la primera manga, para sorpresa generalizada. Porque el austriaco había ganado seis de las siete últimas pruebas de esta disciplina disputadas.

El caso es que, con el dorsal 5, el 'súper campeón' austriaco se salió de pista en la parte intermedia del primer trazado; con lo que de forma automática cedía el testigo de principal candidato al triunfo, el noruego Kristoffersen, que lo había secundado -tras protagonizar la remontada en la segunda manga- en el gigante del pasado domingo.

Pero en una prueba tan alocada, como sorprendente, el noruego también la pifió, en la segunda y decisiva bajada. Y Myhrer, que contaba ocho victorias en Copa del Mundo y tres medallas en Mundiales -siempre en la prueba por equipos-, festejó, con 35 años, el triunfo más importante, al añadir el oro de este jueves en Yongpyong al bronce olímpico que había ganado en esta disciplina hace ocho años, en Vancouver 2010 (Canadá).

Kristoffersen lideraba la prueba con 21 centésimas sobre Myhrer, que le birló el triunfo al aprovecharse del fallo del noruego, sacándose la espina del eslalon olímpico de Sochi, en el que también iba segundo tras la primera manga, pero se salió de recorrido en la segunda.