Sam Allardyce ha dejado de ser seleccionador de Inglaterra. Eltécnico ha sido pillado por una cámara oculta del Daily Telegraph diciendo cosas que no debería alguien en su cargo y que rozan la corrupción. Sus explicaciones a la Federación Inglesa de Fútbol en una reunión de urgencia no han satisfecho a nadie. Tras 67 días y un solo partido en el cargo, Allardyce ya es historia. Gary Southgateserá su sustituto.

En la grabación, Allardyce aparece negociando con reporteros que se hacen pasar por empresarios un acuerdo valorado en 400.000 libras (460.000 euros) para aconsejar a una firma de inversores asiática sobre la adquisición de futbolistas, una práctica prohibida en Inglaterra.

'Big Sam', como es conocido en Inglaterra, puede presumir de irse con el 100% de victorias como seleccionador. Un partido, contra Eslovaquia, saldado con agónico triunfo (1-0). Pero será, obviamente, un historial manchado para alguien que siempre soñó con ser seleccionador de su país y que lo había logrado a sus 61 años. Allardyce se declaró "avergonzado", pero subrayó que no ha cometido ninguna ilegalidad.

"UNA MALA INFLUENCIA"

En la grabación un relajado Allardyce explica, entre otras cuestiones, cómo burlar la normativa sobre la propiedad de jugadores por parte de terceros, una controvertida práctica prohibida por la FA desde el 2008 y adoptada por la FIFA. Igualmente critica a diferentes personalidades del mundo del fútbol como su predecesor, Roy Hudgson, de quien se burla por su forma peculiar de hablar. También califica a su asistente, Gary Neville, como "una mala influencia", y hasta osa hacer burla de la familia real.

De la FA dice que "solo está interesada en hacer dinero" y que se ha convertido en la federación "más rica del mundo", si bien precisa después que "se gastó de manera estúpida 870 millones" en el estadio de Wembley, "una deuda que aún está pagando". Ataca también a la Hacienda británica, "la institución más corrupta de nuestro país".

Pero lo que más se le está volviendo en contra es el asunto de la multipropiedad de jugadores, porque Allardyce cree estar negociando con una firma sobre cómo asesorar para burlar la ley del fútbol inglés. "De todas formas, en Sudamérica, Portugal, España, Bélgica y África se puede seguir haciendo todo esto", explica el ya exseleccionador en la cinta.

IGUAL QUE NEYMAR

Los trapasos de futbolistas mueven cientos de millones en Inglaterra y es un negocio muy apetecible. Sus derechos, sobre todo en Sudamérica, pueden estar repartidos entre su club y algún grupo de inversión, como es el caso de Neymar con DIS, o en su díaMascherano, Tévez y tantos otros.

La encerrona a Allardyce se produjo en dos encuentros, una en Londres y otra en Manchester, y duraron cuatro horas en total. El Daily Telegraph había prometido dosificar la información y emitirla por capítulos. Este jueves el Telegraph reclamaba su destitución. Lo ha conseguido.