El Segorbe sumó ayer un punto en un encuentro muy disputado en El Sisterre entre el equipo de la capital del Alto Palancia y el Paterna. Un choque marcado por el fuerte viento, ya que los valencianos dominaron y tuvieron las mejores ocasiones en el primer tiempo, mientras jugaron con el viento a favor, pero con el cambio de campo el Segorbe pasó a controlar el juego al jugar a favor del viento en la segunda parte.

Los locales estrenaron guardameta bajo palos, ya que Kilian, que estaba siendo el portero titular esta temporada, ha abandonado la disciplina del Segorbe durante la semana para incorporarse al Torre Levante.

Su sustituto ha sido Carlos, hasta ahora portero suplente, quien protagonizó ayer varias intervenciones de mérito e incluso estuvo a punto de evitar el primer tanto visitante. Corría el minuto 20 cuando el árbitro pitó penalti tras una falta de Bily sobre Tobías. El delantero lanzó la pena máxima, y aunque Carlos pudo rechazar el balón, este volvió a Tobías que no falló a la segunda.

Las cosas se le complicaron aún más al Segorbe tan solo cinco minutos después, cuando el visitante Civera, en fuera de juego, anotaba el segundo para el Paterna.

El panorama pintaba negro para los del Alto Palancia a poco para irse al descanso, pero entonces el Segorbe recortó distancias. Sopeña controló el balón dentro del área tras un saque de banda y lo envió de tiro cruzado al palo contrario del portero, que no pudo hacer nada para evitar el tanto.

La igualada llegaría a los pocos minutos de la reanudación, cuando tras un saque de esquina el visitante Duco envió el balón al fondo de su propia portería al intentar rechazarlo.

indignación en twitter / La cuenta oficial en Twitter del CD Segorbe volvió ayer a mostrarse muy crítica con la actuación arbitral. «Un penalti que nadie ve y un segundo gol con dos jugadores tres metros fuera de juego, así es imposible». Esta era la valoración del club segorbino tras el empate, e incluso añadían que «nos estamos planteando en serio la situación que tenemos respecto a los árbitros, no hay derecho, es inaguantable la situación».