El Sant Jordi puso fin a una racha de tres derrotas consecutivas doblegando a un Burriana que desaprovechó una buena oportunidad para acercarse a los puestos de promoción de ascenso (3-1).

Los amarillos fueron en todo momento quienes llevaron el peso del partido y desde bien pronto impusieron su ley ante un Burriana más blando de lo normal. Felipe, con un doblete, materializó la superioridad local en los primeros 45 minutos.

Tras el descanso, el Burriana reaccionó y se metió en el partido con un tanto de Megina a falta de quince minutos para que concluyese el encuentro. Sin embargo, Espinosa en el tiempo de descuento, acabó con cualquier opción celeste poniendo el 3-1.