Desde un césped que ya no es césped, a una grada que se cae a trozos, pasando por unos aseos y localidades sin higiene, grietas estructurales, óxido en los hierros... Castalia a día de hoy es una vergüenza para la ciudad y un peligro para los cientos de aficionados que acuden a ver a su CD Castellón. Enric Porcar, concejal de Deportes, ya dejó clara su postura: «El estado del campo es lamentable y no puede seguir así». El edil afirmó también que «el tiempo de Cruz ha acabado» y añadió que «todos los grupos parlamentarios en el Ayuntamiento han cerrado filas al respecto».

Tras exponer Porcar desde Compromís su postura, Mediterráneo quiso ayer testar la opinión de las cuatro formaciones restantes con representación municipal. También desde el equipo de gobierno, Rafa Simó (PSPV-PSOE), se mostró igualmente crítico: «Es evidente que el estado de Castalia es deplorable y hay que ponerle solución. El club debería haber corrido con el mantenimiento del campo, pero no se puede dejar pasar el tiempo porque se convertirá en un problema de seguridad y se nos caerá encima». El concejal y portavoz socialista espera que «la guerra fría que Cruz mantiene con la ciudad termine» y no descarta, al igual que Porcar, la opción de desalojar al club del campo municipal: «Esperemos llegar a otra solución antes, pero sí se plantea».

En el plano institucional, Simó afirma que «es difícil que el futuro pase por Cruz» y no esconde su deseo: «A todos nos hace ilusión que un grupo inversor con gente como Dealbert o Pablo pueda entrar después de la travesía por el desierto por la que pasamos».

SOLUCIÓN INMEDIATA // Desde el PP, Begoña Carrasco no exime tampoco de responsabilidades al equipo de gobierno: «Castalia es un bien municipal y no puede estar en esas condiciones. Mientras fui concejal de Deportes nunca le di una ayuda al club, lo que hacía era invertir en el estadio, ahora está abandonado a su suerte».

Sobre Cruz, la portavoz popular prefiere «no opinar», pero sí se muestra preocupada por el destino del club: «El CD Castellón es patrimonio de la ciudad y me da miedo que si no se toman medidas se vaya a liquidación». Sobre una posible solución, la tiene clara: «Que venga un comprador, un grupo inversor con ilusión y a poder ser de gente de Castellón».

También analiza la situación del club y el campo municipal Iñaki Vallejo, de Castelló en Moviment: «La cesión de Castalia es uan subvención encubierta, así que habría que replantearse el convenio porque a la vista está que no hay mantenimiento. Denunciamos el tema en comisión y habrá que pensarse si se vuelve a arreglar pagando entre todos, porque si se hace el año que viene tendremos el mismo problema». El concejal afirma que «la gestión de Cruz no es la mejor. Tomarse esto como un negocio particular no es la mejor fórmula».

Por último, Vicente Vidal, de Ciudadanos, sobre el campo reconoce que «preocupa la seguridad. No queremos que los aficionados se preocupen por si les cae un trozo de estadio en la cabeza» y sobre el club confía en «evitar que acabe desapareciendo por una gestión controvertida».