No hay nadie que tenga tan estudiada la red viaria provincial como él. Diego González (42 años) ha convertido su afición a la bici en su pasión, plasmándola en una página web en el que queda retratada hasta la última de las cuestas de esta/nuestra geografía, que pasa por ser la segunda más montañosa del país.

La relación con las dos ruedas de este castellonense que ejerce como profesor de Física y Química en el IES Francesc Tàrrega de Vila-real comenzó cuando tenía 17 años, un cuarto de siglo atrás.

“Siempre he mirado las altimetrías de los puertos de la Vuelta a España. Sabía que había alguien, en Cataluña, había publicado las descripciones de todos los puertos, así que aproveché que también empecé a salir en bici y me pregunté: ¿por qué no puede hacer yo lo mismo con los de Castellón?”, rescata.

UN TRABAJO DE ‘CHINOS’ // Así que con un altímetro barométrico y una grabadora, cotejando los datos con mapas precisos, inició su particular radiografía de la red viaria provincial. Veinticinco años después, ha recopilado todos los datos en la web http://altimetriascastellon.sportsontheweb.net/, donde deja constancia de un centenar de puertos, colls, cimas, altos y toda cuesta que se precie, además de cerca de una veintena de rutas atractivas.

“Es un trabajo de más de 10 años, aunque fue a partir del 2008, cuando sufrí un fuerte golpe en la rodilla y estuve varios meses casi sin salir de casa, cuando me puse en serio: ¡ni siquiera sabía cómo crear una página web!”, destaca Diego.

“No sabía decirte cuánto tiempo he invertido en esto”, destaca, simplemente trasladando los datos tomados ‘in situ’ al ordenador. “¿Tres mil horas…? No sé…”, agrega. Además, todos los ha subido en bici “menos un par, por el tráfico que había”, matiza orgulloso después de completar una labor que puede servir y está sirviendo a un buen número de usuarios de la citada página web.

UN ESTUDIO INÉDITO // No es un análisis cualquiera, sino uno pormenorizado por vertientes, altitud, desnivel, longitud, coeficiente, pendiente máxima y carretera. Una enciclopedia para el cicloturista interesado en descubrir una orográfica tan interesante y caprichosa como es la castellonense. Con modestia, Diego González asume que todavía le queda algún rincón por descubrir: “Me faltan algunas zonas próximas a Morella y a Viver, por el Alto Palancia”, asume. “Sí, la verdad es que poca gente conocerá tanto las carreteras de la provincia como yo…”, admite, también con humildad.

AMPLIANDO HORIZONTES // Por si no hubiese tenido bastante, González también ha hecho lo propio con puertos de otras zonas de España e, incluso, de Europa. “He conseguido convencer a mi mujer y mis dos hijos para, algunas veces que viajamos, poder llevarme la bicicleta”. Así continúa con su particular labor, muy apreciada en el mundo cicloturista de la provincia, tanto de los más expertos como de los que se inician en este mundo y que se crecen con cada cima que conquistan. H