Yo siempre intento ver la botella medio llena, sin perder la vista cuando se vacía. Hace tiempo que decidí alejarme de la ‘violencia’ que se genera en las redes sociales. Me quedó con lo positivo que ha generado ese fenómeno social y paso olímpicamente de aquellos que purgan sus frustraciones con insultos o desprecios constantes a todo lo que se menea. Siempre sin perder la perspectiva.

Pienso que Pablo Fornals es un pedazo de jugador y un chico muy bien amueblado. De primera mano me lo ha comentado varias veces Javi Gracia, el entrenador que le dio la alternativa en el fútbol profesiona. Y yo le voy a recibir con los brazos abiertos igual que la afición amarilla. Le valoraré por su fútbol y disfrutaré de su talento.

No sé si los tuits que escribió presuntamente hace tres años en tono un tanto peyorativo para el que ahora es su actual club, casi cuando ni era mayor de edad, son reales. En su timeline ya no figuran en este momento, por tanto no puedo asegurar la veracidad de los mismos Si realmente son ciertos, y existieron, lo consideraré un pecado de juventud. Desafortunado, pero uno más de los errores que se cometen al teclear en las redes sociales al primer impulso sin racionalizar las consecuencias.

Todo el mundo tiene derecho a equivocarse y no le condenaré eternamente. Si no existieron esos tuits, y son un fake, pues nada más que comentar. Creo en la honestidad y la sinceridad de las personas y Pablo Fornals merece mi voto de confianza tanto si reconoce que los escribió, y se disculpa, como en caso de que no fuera así. Lo que sí les puedo asegurar es que ha puesto todo de su parte para ser del Villarreal y que acabará peleando y queriendo esa camiseta. Eso sí lo puedo corroborar y es el presente.

En mi opinión, el Villarreal ha firmado un futbolista importantísimo. Por mi parte, ¡Bienvenido, Pablo! Puro talento de la terreta.