Decía Marcelino semanas atrás que necesitaban el empujón de Mestalla para asegurar una plaza en la próxima Champions y la afición respondió ante el Betis en la primera de las últimas seis finales del Valencia en casa (Alavés, Espanyol, Getafe, Eibar y Deportivo serán los siguientes en pasar por la capital del Turia). 15 puntos de los últimos 13 en juego, justo después de una racha de seis partidos sin ganar, han reconducido la temporada de un equipo che que podría certificar su gran objetivo el próximo sábado en Nervión (16.15 horas), pues todo lo que sea no perder frente al Sevilla prácticamente le asegurará una posición entre los cuatro primeros de la Liga.

El encuentro ante el Betis, con el único pero de la lesión de Santi Mina (pinchazo en el muslo), sirvió para el reencuentro con el gol de los otros artilleros de referencia de Marcelino: Rodrigo (no veía puerta desde el 13 de enero) y Zaza (su última diana se remontaba al 9 de diciembre). El italiano la lió. En la celebración de su tanto, haciendo con la mano el gesto de «hablar, hablar» hacia la grada; y después, por un agresión a Fabián que el árbitro no vio. El Betis se quejó de un gol anulado por falta a Neto con 2-0.