La frenética cuesta de enero (todavía vigente, aunque metidos por unas horas ya en febrero) toca a su fin para el Castellón con la prueba más exigente de las ocho que ha tenido que pasar en los últimos 29 días (con permiso de Villarreal C, Atlético Levante, Torre Levante, Orihuela...). El Clariano y el Ontinyent aguardan, a las cinco de esta tarde, amenazando con manchar la tarjeta de visita con la que los orelluts recalan: 13 jornadas sin conocer la derrota.

Para no desfallecer, los albinegros cuentan con un suculento aliciente. En puertas de cumplir con la obligatoria jornada de descanso, el Castellón es consciente de que, si vence en la Vall d’Albaida, mantendrá los cuatro puntos respecto al segundo. O sea: esa situación le permitiría librar el parón forzoso en lo más alto. Recién iniciada la segunda vuelta, puede parecer algo secundario, pero que no haría otra cosa que reforzarle, en lo moral.

SEIS BAJAS // Ni esta semana, la primera en mucho tiempo que el equipo ha tenido siete días para preparar un partido, sin encuentros entre medias ni mucho menos viajes agotadores, el Castellón lo ha tenido todo de cara. Los problemas son de diversa índole, pero Calderé no podrá echar mano de Rubén Suárez (ya lo sabía desde el domingo, cuando fue rigurosamente expulsado frente al Atlético Levante), Roger Canadell (acusa un golpe desde ese choque), Diego Carrillo (su musculatura se ha resentido), Jon Uriarte (fuera de forma, tras meses y meses sin jugar), Borja Quirant (lesionado de larga duración) ni con Juanra (se ha quedado fuera a última hora por motivos familiares).

La amplitud de la plantilla, tanto en cantidad como en calidad, deberían minimizar este tipo de adversidades, aunque se acumulen en el tiempo y en puertas de un encuentro de armas tomar. Sí, pero a excepción del recién llegado, el resto están entre los futbolistas más alineados, fruto de su notable aportación al colectivo.

Está definido el armazón del equipo que, de entrada, comparecerá en el terreno de juego de El Clariano. Nos referimos a Álvaro Campos bajo palos, a Marc Castells como eje gravitatorio, Dani Pujol partiendo por el costado derecho y a la presumible composición del triángulo de las Bermudas con Charly Meseguer, Albert Yagüe y Rubén Negredo como sus tres vértices. Además, existe un dilema para relevar a Rubén Suárez en el ataque del Castellón (¿Omar o Víctor Pino?).

LA ZAGA ALBINEGRA // En defensa, la baja a última hora de Juanra Cabrero por un motivo familiar ha hecho que se despejen las dudas en cuanto a la retaguardia. Adrià Gallego y Pablo Suárez ocuparán ambos carriles, en tanto que Guille Vázquez y Javi Selvas serán los dos centrales. Sin duda, una defensa de garantías.

Todos ellos tendrán la complicada tarea de detener a la pareja más peligrosa del grupo VI, la formada por Christian Perales y Marcos Campos, que han firmado 20 de los 32 goles (12 y 8, respectivamente) de un equipo del Ontinyent que lleva ocho jornadas sin perder y cuatro empates consecutivos, pero que es el equipo con mejores prestaciones ante su público: 26 de 33 puntos. H