Cuatro chicos del filial en la lista de 19 jugadores del Villarreal que ayer aterrizó en el aeropuerto de Vitoria con bajas sensibles. Fran Escribá no podrá contar para el partido de esta noche en Mendizorroza (20.45 horas, beIN LaLiga) con hasta ocho jugadores de la primera plantilla, pero sí podrá contar con un buen equipo para competir. La fortaleza y la amplitud de la plantilla dispondrán de otra prueba de fuego importante en la lucha por una plaza europea. Sergio Asenjo, Rukavina, Víctor Ruiz, José Ángel, Jonathan dos Santos, Soldado, Cheryshev y Samu Castillejo serán las ausencias por lesiones, en la mayoría de los casos, y por sanción en Vitoria.

Cuatro jugadores del filial en la lista

El entrenador del Villarreal ha tenido que echar mano de cuatro jugadores del filial, que el pasado sábado venció al Hércules y ya acaricia los puestos de promoción de ascenso a Segunda A, para completar una relación de 19 futbolistas de la que hoy, poco antes de que se inicie el partido ante el Alavés, se caerá uno. Lazo, Cantalapiedra, Leo Suárez y Mario González fueron los jugadores elegidos por Escribá para tapar los huecos que dejan las numerosas ausencias.

Con solo un hombre de banda: Soriano

La plantilla grogueta posee mimbres para suplir las bajas en cualquier demarcación, salvo en las bandas del centro del campo, donde la acumulación de lesiones ha dejado al italo-alemán Roberto Soriano como el único jugador específico en esa demarcación. No obstante, Escribá ya ha utilizado a su comodín Adrián López en momentos puntuales como interior diestro. Así, el punta asturiano se postula como el principal candidato para ocupar una de las dos plazas de interiores del Submarino, aunque tampoco podría descartarse la opción Nicola Sansone, a quien el propio entrenador ya ha apuntado en varias oportunidades como una alternativa más que válida para jugar en banda.

La baja del Mariscal Víctor Ruiz

La lesión de Víctor Ruiz —que también acumula la sanción de dos partidos que le impuso la pasada semana el Comité de Competición— supone, posiblemente, el contratiempo más sensible para el equipo, porque el central zurdo venía siendo el hombre más regular e importante de la zaga amarilla. Su puesto lo cubrirá Álvaro González, quien se ha convertido en un hombre solvente en el eje de la zaga cuando ha jugado. A su lado el argentino Mateo Musacchio, con Mario y Jaume Costa en los laterales, completarán la defensa más sólida de la presente Liga.

La parcela ancha está bien cubierta con el capitán, Bruno, Manu Trigueros y Rodrigo, con los dos primeros como pareja más utilizada por Escribá, pero con el joven canterano como relevo de lujo para cualquiera de los dos mediocentros titulares.

Sin el genio de Roberto Soldado

Para el ataque, no disponer de Roberto Soldado siempre es un lastre importante por la jerarquía y la opción de 9 de referencia que ha aporta el valenciano desde su regreso a la competición, pero Bakambu, Sansone y Santos Borré pueden conformar una delantera de garantías, sin olvidar a Adrián, a quien las circunstancias pueden llevar a uno de los costados en la final de Mendizorroza, que los amarillos afrontarán conociendo de antemano los resultados de sus más directos rivales por la plaza europea. Pese a las ocho bajas, el Villarreal afronta la cita de hoy en Vitoria con un buen equipo y luciendo plantilla.

Más que tres puntos en Vitoria

El pinchazo de la Real Sociedad en el Camp Nou el pasado sábado, unido al del Eibar en el Benito Villamarín, mantiene a distancia a dos directísimos rivales —a falta del partido de Mendizorroza, a dos y a cuatro puntos, respectivamente—, pero por detrás se sigue notando el aliento del Athletic, y en menor medida del Espanyol, que se suma, aun a cierta distancia, a la pugna por los puestos que darán derecho a disputar la próxima edición de la Europa League.

Conservar el colchón de ventaja

El Villarreal posee un pequeño colchón, pero las visitas al Calderón y al Camp Nou dejan poco margen de error y no salir de vacío de Vitoria supondría una buena dosis de tranquilidad para este esprint final por Europa. La mejor baza del Villarreal hoy será su filosofía de equipo y esa etiqueta de continuar siendo el equipo menos goleado de Primera División.