El billete para el play-off de ascenso a Segunda División tendrá que esperar. El Villarreal B sucumbió en el feudo del UE Cornellà y pese a que mantendrá el liderato del grupo cuando restan dos jornadas para la conclusión de la fase regular, el Reus le puede dar caza hoy si saca adelante su encuentro a domicilio ante el Eldense.

Porque ayer era una oportunidad idónea para asegurar su presencia en la fase de ascenso a la categoría de plata del fútbol español pero la falta de acierto, el planteamiento del rival y, en gran medida, el colegiado, impidieron a los de Paco López hacerse con los tres puntos en juego.

Desde el principio la trampa que plantearon los locales atenazó al Mini Submarino. En un campo de pequeñas dimensiones y en un escenario marcado por el fútbol directo y brusco que los catalanes llevaron hasta el límite, con la inestimable connivencia del trencilla, los de Paco López no pudieron hacer valer su superioridad futbolística.

Mientras el Villarreal B quería el balón e intentaba hacerlo correr por el verde, los locales tenían el esférico por castigo y dejaban claro desde el principio que su fútbol iba a sustentarse única y exclusivamente en el juego directo, el balón parado y en intentar cazar algún rechace ofensivo en segundas jugadas.

OCASIONES PERDIDAS // Con estos mimbres fue el filial groguet el primero que llamó a la puerta del gol en sendas ocasiones que Carlos Martínez no acertó a materializar frente a un Marcos que fue, sin lugar a dudas, el mejor de los suyos en la tarde de ayer.

Con el 0-0 inicial se llegó al descanso y tras el paso por vestuarios el guión futbolístico poco cambió pero si lo hizo el del resultado. En dos ocasiones a balón parado, dos saques de banda, y como no podía ser de otro modo tras varios rebotes en el área amarilla.

El primero de los tantos locales, en el 68, llegó merced un disparo mordido de Lulu que acabó envenándose y superando por arriba a Aítor mientras que la puntilla para el filial vila-realense estuvo marcada por el infortunio con el amarillo Edgar Ié metiéndose el esférico en propia puerta. H