El Villamarín vivirá esta tarde a la hora de la siesta (16.15, beIN LaLiga) uno de los partidos más atípicos de Primera, una auténtica batalla por el balón. En una época en la que el rigor táctico es casi una religión, Betis y Villarreal suponen dos oasis en el desierto del fútbol moderno. Quique Setién y Javi Calleja, con dos sistemas y estilos diferenciados, tienen un denominador común, o dos. Quieren tener el balón y, a su vez, no especulan, buscando siempre el marco rival. Dos premisas innegociables.

Eso sí, hay matices. Mientras el Villarreal no descuida la parcela defensiva y el repliegue colectivo es una de sus virtudes, los béticos plantean algo similar a un continuado ataque suicida, marcado por una fragilidad defensiva que le ha llevado a ser el tercer equipo más goleado. La debilidad atrás de los verdiblancos, en especial en las jugadas a balón parado, debe ser una de las armas que ha de aprovechar un equipo de Calleja, que llega a Sevilla lanzado, encadenando tres triunfos consecutivos: en el Bernabéu y en casa frente a Levante y Real Sociedad, y un total de seis encuentros sin conocer la derrota, sumando 16 puntos de los 18 posibles.

El Submarino ha dejado bien claro que su objetivo liguero es clasificarse para jugar en Europa la próxima temporada, y si es en Champions mejor. Por ello que nadie oculta que se mira de reojo el cuarto puesto. Eso sí, para el duelo de esta tarde Calleja cuenta con hasta siete bajas, ya que a las consabidas de Andrés, Semedo, Bruno, Adrián Marín, Ramiro Guerra y Sansone, se ha unido la ausencia de Roberto Soriano, que sufre un esguince de rodilla.

CON FUEGO, SIN SALEM / Por el contrario, el técnico madrileño del Villarreal recupera a Álvaro, además de haber incluido en la lista a Javi Fuego, el último fichaje en el mercado invernal que entró en una lista de convocados en la que también está el colombiano Roger Martínez, pero no el saudí Al Dawsari, que aún no está al 100% pero sobre el que Calleja dijo estar «gratamente sorprendido».

Con todo, el míster groguet dispondrá un once muy ofensivo en el Villamarín, que no diferirá del formado por Asenjo en portería; en la defensa de gala con Mario y Jaume Costa en los laterales y Álvaro y Víctor Ruiz como pareja de centrales. Rodrigo será el eje por delante de la defensa, aunque no hay que descartar al recién llegado Javi Fuego; con Trigueros y Castillejo como interiores, Fornals de enganche, y en ataque la dupla Bacca-Ünal, llamados a entenderse y ser el bastión ofensivo de aquí a final de temporada.

El Villarreal que quiere prolongar su racha y superar al ofensivo Betis de Setién, que no podrá contar con su capitán, Joaquín, por sanción, pero en el que debutará su último fichaje, Bartra.