Si Zinedine Zidane se queja después del partido de esta noche de haber denotado una motivación especial del Villarreal ante el líder, esa será la mejor noticia para los amarillos. No disimuló ayer el francés, un día antes de viajar hacia Vila-real, su mosqueo con la actitud que, en su opinión, adoptan los rivales del Madrid. «No es el mismo rival cuando juegan contra otros. Debemos tenerlo en cuenta». No podrá denunciar Zidane un trato diferente del Villarreal con los otros aspirantes al título de Liga (Barça, Sevilla y Atlético), que esta temporada, uno tras otro, han sufrido lo indecible en el Estadio de la Cerámica.
Como ellos, el Madrid también llega preparado a afrontar un duro examen que pondrá a prueba el poder de reacción de los blancos, como apunta Zidane siempre fiable: «No nos cuesta reaccionar. Nos levantamos cada vez que no sumamos. Antes de visitar al Valencia habíamos ganado cuatro partidos seguidos. Sabemos que podemos hacerlo».
Ante el Submarino, sin embargo, el entrenador del Madrid es consciente de que el equipo deberá dar un plus. «Es más dificil todavía», dice el responsable del banquillo merengue, que ayer no escatimó elogios hacia los de Escribá. «El Villarreal es un rival muy bueno. Defensivamente son un bloque seguro y, además, tiene mucha calidad en ataque. Sabemos la dificultad», comentó Zidane tras el último entrenamiento de su equipo.
EL PARTIDO DEL CALDERÓN / El francés incluso pasó de largo el partido que antes de la cita en el Estadio de la Cerámica afrontarán el Atlético y el Barcelona, que en caso de victoria culé pondría en riesgo el liderato blanco —que aún tiene un partido pendiente, el suspendido en su día en Balaídos—. Zidane simplemente dejó caer que, pase lo que pase en ambos escenarios la de hoy «no será una jornada clave».
Con respecto al estado en el que afronta su plantilla el choque ante el Villarreal, Zidane se felicitó por la total recuperación de Bale —«está al cien por cien»—, pero lamentó tener que prescindir durante un mes de Varane. «Es una baja muy dura», dijo Zidane, que no desveló el nombre de su relevo, Pepe o Nacho: «Mañana se verá quien juega».
