Las acciones de Abengoa cayeron ayer más de un 30% tras aprobar el consejo de administración una ampliación de capital de 650 millones de euros para reducir deuda y complementar su plan de ventas de activos.

Los títulos del grupo cerraron la jornada con un descenso del 30,87%, hasta los 1,415 euros, y se situaron en sus mínimos anuales. El desplome se une a las caídas sufridas desde finales del mes de julio, cuando anunció que unificaría las garantías de su deuda para frenar la especulación de los inversores.

El consejo de administración aprobó proponer en una junta extraordinaria la aprobación de una ampliación de capital con derechos de suscripción preferente. Los fondos serán utilizados para reducir deuda corporativa en 300 millones de euros y para fortalecer sus fondos propios. El accionista mayoritario de Abengoa, Inversión Corporativa, avanzó que participará en la ampliación con nuevos fondos. Además, Abengoa ha lanzado un nuevo plan de desinversiones por un total de 500 millones de euros, que incluyen los 400 millones ya anunciados el pasado viernes 31 de julio, así como desinversiones adicionales de activos de bioenergía.