A finales de agosto, Aston Martin expresaba su intención de salir a la Bolsa de Londres ofreciendo, como mínimo, un 25% del capital de la empresa, lo que supone 57 millones de acciones aproximadamente. Este movimiento llega en un contexto de incertidumbre para la firma por culpa del Brexit, ya que todos sus vehículos son fabricados en Inglaterra.

Se espera que durante este jueves la marca de Gaydon publique un folleto explicativo sobre su salida al parqué londinense con más detalles. De momento, Aston Martin ya ha establecido un rango que oscilará entre las 17,50 y las 22,50 libras (19,7-25,3 euros). Mediante esta Oferta Pública de Valores, valorada en 5.070 millones de libras, 5.714 millones de euros, la compañía será la primera en muchos años en salir al a Bolsa de Londres y la primera en salir a cualquier mercado desde que Ferrari saliera en la de Nueva York en 2015.

Con todo, el objetivo de la marca es lograr una capitalización mínima de 4.020 millones de libras (4.535 millones de euros). De momento, Andy Palmer, CEO de los de Gaydon, ha asegurado a la agencia Reuters un interés ''sin precedentes'' por la OPV de Aston Martin por parte de los inversores. Según las primeras informaciones, el día 3 de octubre se podrían conocer los precios finales y el día 8 empezar a cotizar.

La firma británica, que el año pasado consiguio beneficios por primera vez desde 2010 y ha pasado por la bancarrota siete veces durante toda su historia, confirmó este miércoles que la OPV se traducirá en la venta de acciones de sus principales propietarios, sobre todo grupos de capital de riesgos kuwaitíes e italianos. Entre enero y junio de 2018, la compañía ha presentado un benefeicio antes de impuestos de 46,3 millones de europs tras ingresar 490 millones de euros, un 8% más que en 2017. Vehículos como el DB11 han ayudado a esta mejora de la salud económica de la marca.

El Brexit

Con el Brexit planeando sobre la Unión Europea, Aston Martin quiere demostrar que "no es un efecto importante" para ellos. Según datos de la misma compañía, apenas un 25% de sus coches van destinados a los mercados europeos. "Si se pone un impuesto para Europa, se responderá con otro para el Reino Unido, por lo que si perdemos un poco de cuota de mercado en Europa, la ganaremos en el Reino Unido", asegura Palmer, que sabe que sus clientes puede afrontar un precio más alto.

El problema para Aston Martin, como podría pasar con McLaren, son las aduanas porque importan componentes y, en el caso de los primeros, motores, y podrían sufrir retrasos en la producción e incluso quedar retenidos en puertos esperando a acuerdos entre el gobierno británico y el europeo. Palmer ha asegurado que han incrementado su stock para anticiparse a posibles problemas en cuanto se produzca el Brexit.

Previsiones positivas

Aston Martin espera emular a Ferrari y atraer a los inversores mediante un discurso basado en la exclusividad y la distinción. De momento, la marca espera vender entre 6.200 y 6.400 vehículos este año y aumentar la cifra en 2019 hasta las 7.300 coches, la cifra que consiguieron en 2007. En 2020, la firma espera llegar a un volumen cercano a las 10.000 unidades.