Sin los más de 3.000 millones de deuda que soportan, las nueve autopistas quebradas (las radiales de Madrid, la R-2, R-3, R-4 y R-5, la circunvalación de Alicante; la Madrid-Toledo,Ocaña-La Roda, Cartagena-Vera y la M-12, que la capital con el aeropuerto de Barajas) son viables.
Así lo considera el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna que, en un acto organizado por El Economista, que ha manifestado la intención de relicitarlas (en su día ya lo fueron y estaban en manos de sociedades concesionarias) "en el momento en el que reviertan al Estado".
De la Serna explicó que estas vías de pago "son actualmente viables si no se considera su 'mochila'", en referencia a su pasivo, aunque no dio pistas sobre si parte de esta deuda correría a cargo de los contribuyentes.
Ante esta perspectiva, la organización de consumidores Facua ha tachado de "despropósito" esos planes y ha recordado que en 1984 ya se rescataron autopistas de peaje "para salvar prácticamente a los mismos concesionarios que ahora piden ayuda: bancos y constructoras".
El ministro aseguró que estas infraestructuras tienen hoy un resultado de explotación positivo «y alguna de ellas presentaaumentos de tráfico mensuales de casi el 20%». La sociedad pública Seittsa será la que pilotará el proceso.
RESPONSABILIDAD PATRIMONIAL
Al ceder de nuevo la concesión de estas vías, Fomento podría obtener recursos para afrontar la responsabilidad patrimonial de la administración (RPA) que supondría su rescate previo. Sería una forma de minimizar el impacto del salvamento en las cuentas públicas.
La RPA es el importe que el Estado debe abonar a los actuales concesionarios de las autopistas por la inversión que realizaron. A juicio de De la Serna esta es una factura inferior a 3.000 millones de euros. Por su parte, la patronal de constructoras, Seopan, calcula que llega casi a 5.000 millones.
De la Serna confirmó que ha concluido sin acuerdo la negociación que emprendió con los acreedores de las vías, en su mayoría 'fondos buitre', sobre el plan de rescate planteado en 2014. El plan pasaba por que el Estado asumiera las autopistas tras una quita del 50% a su deuda y titulizara a través de un bono el resto del pasivo. El ministro explicó que lo que queda por delante será un proceso lento porque aún se desconoce si tendrán que asumir todas las autopistas y si se sacarán a concurso individualmente o en paquetes.
BUENA NOTICIA
Para De la Serna es una "buena noticia" que los tribunales estén suspendiendo o dejando en suspenso los procesos de liquidación a los que ya han llegado alguna de las autopistas quebradas. Eso, ha dicho, "da más margen para maniobrar y prepararnos para si hay que quedárselas".
La Audiencia Provincial de Madrid resolvió suspender la liquidación de la autopista de circunvalación de Alicante, que ha vuelto así a lafase del concurso en el que la concesionaria puede negociar la deuda con los acreedores. Se espera que pase lo mismo con la R-3 y R-5. Si la Audiencia se pronunciara de igual forma sobre estas dos raidales, Fomento ya no tendría que asumirlas el 1 de julio, como decretó un Juzgado Mercantil.
El desplome de tráfico con la crisis, la construcción de autovías gratuitas paralelas y los sobrecostes de expropiaciónprovocaron la quiebra de estas vías diseñadas con José María Aznar de presidente.
